Su llegada al banquillo ‘magpie’, el 9 de diciembre de 2010, fue un tanto polémica. Tras el despido de Chris Hughton, 40.000 aficionados del Newcastle fueron encuestados sobre quien debería convertirse en el nuevo entrenador del club y Alan Pardew apenas recibió el apoyo del 5,5%.
La hinchada recibió al técnico de Surrey con bastante recelo e incluso llegaron a apodarle con términos despectivos. Pardew reconoció que no sería una tarea fácil. Hacerse cargo del Newcastle suponía todo un reto; aunque nunca se le pasó por la cabeza rechazarlo.
Su carrera como entrenador comenzó en el año 1999 con el Reading, donde a sus 38 años se consolidó como uno de los técnicos más prometedores. En su primera campaña ayudó el equipo a recuperarse de un decepcionante comienzo y terminaron en la décima posición de la Division Two. Al año siguiente se incorporaron jugadores como Nicky Shorey o Jamie Cureton y finalizaron la temporada en la tercera posición. Perdieron la final del ascenso contra el Walsall pero un año después subieron automáticamente a Division One.
“En Argentina hubiera sido
despedido hace tiempo”
En verano del año 2003, el recién descendido West Ham pidió permiso al Reading para negociar con Pardew pero el presidente se negó. Esto provocó la dimisión del técnico y el 20 de octubre de 2003 se convirtió en el nuevo entrenador del West Ham, un gesto que los aficionados del Reading no le perdonaron jamás.
En la temporada 2004/05, logró ascender al conjunto londinense a la Premier League y al año siguiente finalizaron en una cómoda novena posición. Sin embargo, las críticas comenzaron cuando en la temporada 2006/07 el equipo cosechó una serie de derrotas que lo llevaron a luchar por el descenso durante gran parte de la campaña. Los nuevos dueños apoyaron al técnico pero la afición comenzó a inquietarse porque el equipo estaba sufriendo su peor racha en 70 años. Finalmente, en diciembre del año 2006 Pardew fue cesado tras una derrota por 4-0 ante el Bolton. Tras su marcha, Carlos Tévez realizó unas declaraciones al diario inglés News of the world y se mostró sorprendido por el tiempo que aguantó Pardew al frente del equipo. “En Argentina o en Brasil hubiera sido despedido hace tiempo. Estaba claro que el equipo no reaccionaba a lo que pedía”, declaró el argentino.
Apenas dos semanas después, se convirtió en el manager del Charlton y aunque el equipo mejoró con su incorporación, no pudo evitar el descenso. En la siguiente campaña finalizaron en una decepcionante onceava posición y Pardew comenzó a sufrir la presión. Una presión que se prolongó durante la temporada 2008/09 y, debido a los malos resultados, la afición del Charlton comenzó a llevar pancartas al estadio con mensajes que pedían su dimisión. Después de una semana de protestas y tras una derrota en casa por 5-2 ante el Sheffield United, el 22 de noviembre de 2008 Pardew fue despedido.
Siete meses después fue nombrado nuevo entrenador del Southampton. Su periplo con los ‘Saints’ apenas duró una temporada en la que ganaron su primer trofeo desde 1976: el Trofeo de la Liga de Fútbol. Un encuentro disputado en Wembley en el que derrotaron al Carlisle United por 4-1. Pero las quejas del personal y los constantes conflictos entre Pardew y Nicola Cortese, el presidente del club, provocaron el despido del técnico inglés en agosto de 2010. Meses más tarde, aterrizó en el banquillo del Newcastle y su carrera dio un giro de 360 grados.
En un principio, los pronósticos sobre el equipo eran bastante pesimistas. La salida de Carroll al Liverpool, el despido de Chris Hughton a mitad de temporada y la poca confianza que generaba la contratación de Pardew hacían pensar que el destino del Newcastle seria los puestos del descenso. Nada más lejos de la realidad. Pardew ha realizado un trabajo magnífico y ha conseguido sacar lo mejor de cada jugador. Ejemplo de ello es Ben Arfa, un jugador excelente; aunque de complicado carácter, que Pardew ha sabido orientar a la perfección. En dos años el técnico ha transformado al equipo y ha logrado la vuelta de los ‘Magpies’ a Europa. En la anterior temporada consiguió finalizar en quinta posición y plantar cara a los rivales más fuertes de la Premier League.
Nombrado técnico del año la pasada campaña, ahora los aficionados del Newcastle han cambiado sus antiguos apodos como ‘Pardwho’ por el de ‘Pardiola’. Pero sin duda, lo más llamativo ha sido el reciente anuncio de su renovación por ocho años. Algo insólito en los tiempos actuales y que demuestra la confianza depositada en el técnico inglés, quien ha admitido que todavía no puede creer que el club le haya ofrecido un contrato de esas características.
La suerte sonríe a Pardew y me viene a la mente la frase que Bill Shankly, antiguo entrenador del Liverpool, le dijo a un aficionado: “Bueno, hijo mío… ¿Qué se siente al estar en el cielo?