El Bilbao BBK Live se ha convertido en una las citas musicales más importantes del verano nacional. He tenido la suerte de cubrirlo y disfrutarlo a partes iguales y me gustaría hacer un top de las que han sido, a mi parecer, las actuaciones más memorables de las últimas tres ediciones: 2011, 2012 y 2013. Es duro tener que hacer la criba y no busco consenso, cada cual tiene sus preferencias y recuerdos. Tal vez hubo algún recital que superó a los presentes en calidad musical o similares, pero lo emocional también cobra peso.
1- Kasabian (2011): Los ingleses no llegaban como cabezas de cartel, pero estaban marcados en rojo en los horarios de mucha gente. Tocaban en el segundo escenario y cuando las luces de la tarde aún morían emergieron como una apisonadora. Fue algo brutal, desde “Club foot” a “Fire”. Pocos o casi ningún grupo ha conseguido hacerme botar de esa manera. Aún sigo esperando para poder verlos de nuevo en directo.
2- Depeche Mode (2013): Era jugar sobre seguro, solo corrían el riesgo de decepcionar. Fue una lección para futuras generaciones de cómo se da un concierto. No importa si no los has escuchado en tu vida; la mezcla de calidad, buen hacer y espectáculo de Depeche Mode crean una atmósfera de la que no se pude escapar nadie. Tocaron el jueves y dejaron el listón demasiado alto para los demás. Las comparaciones son odiosas.
3- The Black Crowes (2011): Eran el cabeza de cartel del sábado. Me emocionaba ver a integrantes de las demás bandas del festival esperar con ansias para ver a este grupo. Había alguno que incluso tocó de víspera e hizo noche en Bilbao para no perdérselos. Fueron desgranando su repertorio poco a poco, con ese ritmo rockero que destilan todas sus composiciones. Fue absolutamente delicioso; grandes canciones, gran interpretación y encima derrocharon simpatía. Un lujo.
4- The Hives (2013): Son una de mis debilidades y tenía que meterlos como fuera, pero lo mejor es que lo merecen. Tocaron de tarde y levantaron a todo el festival. Los suecos sacudieron los tímpanos de todos los presentes, hasta de los que no estaban atentos. Dejaron para el recuerdo las imágenes de todo el mundo saltando durante el tema “Tick Tick Boom”. Una vez finalizado su directo, solo me entran ganas de verlos otra vez.
5- Radiohead y The Cure (2012): Es casi una obviedad que fueron los mejores de 2012 y yo los meto en un pack. The Cure tocaron el jueves y disfrutaron de mucho tiempo para ofrecer su repertorio al ejército de gente con cara pálida que llenaba Kobetamendi. Fue un viaje genial por todos sus clásicos, de esos que quieres disfrutar de nuevo a los años, cuando el sabor de sus canciones se ha potenciado en tu paladar. Radiohead, por su parte, fue un directo de los que le cuentas a tus hijos que has visto. Tenía esa sensación de estar en un lugar importante porque esta tocando una banda importante de la historia de la música. Recuerdo el juego de luces con mucha agrado, similar al que me produjeron las de Depeche Mode.
6- Suede (2011): Llegaron por la baja a última hora de Amy y gracias al favor que le hizo el festival murciano SOS 4.8 al Bilbao BBK Live, puesto que estos tenían la exclusividad de la banda británica durante de 2011. Dieron un recital de energía; composiciones directas que caían sobre la masa como una bala. Un cantante tan entregado que contagiaba al público. Desde la distancia que crean los eventos musicales tan grandes, daba gusto seguir con la mirada los movimientos de frontman.
7- Kaiser Chiefs y Beady Eye (2011): Nombro a estos dos grupos juntos porque tenía muchas ganas de ver a ambos y porque salí contento de los dos shows. Los primeros, directos desde Leeds, fueron un tornado. Venían con un disco algo menos movido debajo del brazo, pero ni la lluvia consiguió que mis pies dejaran de disfrutar con todas y cada una de las composiciones elegidas. Beady Eye, por su parte, era un salto al vacío. Estaban recién nacidos como quién dice y parecía la venganza personal de Liam con Noel tras la ruptura de Oasis. Su disco era un poco flojo, pero el concierto no defraudó. El de Manchester estuvo muy comunicativo con el público, algo raro, pero igual de irreverente que siempre. Es lo que buscas cuando vas a verle en directo, que haga de esas idioteces de siempre.
8- Green Day (2013): Llegaban al final de su gira y dieron uno de esos medidos y estudiados concierto de todas su giras. No es algo malo; no dejan lugar para sorpresas, pero tampoco para malos ratos. Son un espectáculo, como ir a ver el musical del Rey León. Es algo que se lo recomiendo a cualquiera. Si pillas a Billy Joe en plenas condiciones, como fue en Bilbao, mejor que mejor.
9- Aún me quedan muchos recuerdos, pero no quiero aburrirles con mis historias de abuelo cebolleta. Creo que lo mínimo es nombrar a algunos como a los nacionales Corizonas (geniales) o Vetusta Morla (vibrantes en 2011), el espectáculo de luz y sonido de The Chemical Brothers, los movidos The Kooks, la diversión con Edward Sharpe and Magnetic Zeros o el buen papel vasco de Fermin Muguruza Kontrakantxa.
Dicho esto, nos vemos en julio.