Un Oasis de hielo. Pongo en mayúscula la palabra que no debería de ir así si siguiésemos con corrección las normas de la lengua porque me refiero a la banda desaparecida que compartían los hermanos Gallagher. Creo que de este modo y con esa frase describo también el estado de la relación entre ambos tras la separación del grupo de Manchester. Desde que dejaran los escenarios, el vínculo entre los dos se ha convertido en un esperpento. Ninguno deja pasar la ocasión de regalar alguna declaración jocosa con la que llenar los titulares de la crónica rosa musical.
Hoy dejo de un lado los acordes y las canciones para centrarme un poco en la farándula. Supongo que a estas alturas todos conocen el tema del cubo de agua y hielo que se están tirando por encima los famosos y los no famosos. Es por una buena causa; está pensado para recaudar fondos para la asociación que estudia la ALS, una enfermedad neurodegenerativa. Si te nominan, debes echarte por encima el citado cubo o pagar cien dólares a la mencionada agrupación. Lo suyo sería que los famosos hicieran las dos cosas, pero alguno solo se está mojando físicamente.
Liam Gallagher, el hermano menos talentoso de Oasis, ha aceptado el reto. Lo ha hecho a su manera, puesto que ha nominado a Bob Esponja, a Ivor de la Locomotora y a su hermano Noel. El que es actualmente líder de Beady Eye no ha dejado pasar la ocasión para mandar un recadito, ya que apostilló antes de nombrar a su familiar que lo hacía “ya que estamos con personajes de dibujos animados”. No quiero ni imaginarme una cena de Navidad en esa casa.