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Alexis Algaba

La bola entró

El Pollito rompe el cascarón

Rotundo y claro. El tenista galo Gilles Simon, actualmente el 19º mejor tenista del mundo, se ha despachado a gusto. En una entrevista concedida a la publicación francesa Tennis Magazine, y que también recoge el blog de tenis PuntodeBreak, el exnúmero 6 acusa a la prensa “que sueña con destapar un escándalo de dopaje en el tenis”. Simon se muestra indignado con los artículos acusadores hacia todos los tenistas y denuncia la desinformación de diversos medios, sobre todo los galos. “Es cargante leer estas cosas. Entrenamos a diario, tratamos de hacer bien nuestro trabajo y vienes con este tipo de mierda que destruye nuestra imagen. Por esto, tan pronto como aparece el principio de un caso de dopaje, están listos para saltar sobre ello”, destaca el francés refiriéndose a artículos de L’Equipe o Liberation.

“El otro día, por ejemplo, en L’Équipe: “Hay más controles en curling que en tenis”. ¡Se burlan de nosotros! De hecho, estaban hablando de controles llevados a cabo por la Agencia Estadounidense Antidopaje, que no tienen nada que ver con el sistema antidopaje del tenis. De modo que nos encontramos con la más completa desinformación. Viendo eso, me encantaría preguntarle al periodista cuál es el sentido de escribir tal sinsentido. ¿Qué quieres transmitir con eso? Cuando veo la portada de Libération diciendo ‘Todos dopados’ con un artículo completamente acusador, me llegué a plantear incluso demandar a los periodistas implicados, porque sin apuntar a ningún jugador en particular se dirigieron a todos, incluido yo”, respondió Simon al periodista encargado de entrevistarle.

Gilles Simon, conocido también como Poussin o Pollito, se moja -y mucho- en todos los temas por los que es preguntado en la entrevista. No deja titere con cabeza y principalmente ataca a prensa y al calendario de la ATP que obliga a jugar torneos en los que se ven derrotas sospechosas. “Dicen que no tengo fuerzas, sólo puntos débiles y a continuación afirman que no puedo llegar más alto. Esto es muy contradictorio. Esto es una tendencia en la prensa, acentuar las cosas que les agradan y atenuar las que no tienen interés para ellos. Nunca hablan sobre el físico de Federer, por ejemplo. ¿Cómo, en quince años de carrera, pueden pasar por alto un parámetro tan importante de su juego? Porque les encanta crear personajes”, afirma Simon, que también se acuerda de Nadal, Djokovic o sus compatriotas franceses Gasquet o Monfils.

“Siempre siento que se habla de mí en comparación a otros, en especial con los tenistas franceses. Se vende el revés de Gasquet o el físico de Monfils. Perfecto, porque son cosas extraordinarias. Pero no necesito que me comparen a estos tipos (…) En cualquier caso, la autopromoción es inútil. Mira a Djokovic: puede hacer todos los esfuerzos que quiera, intentarlo más duro, y no va a ser ni Roger ni Rafa en los corazones de la gente”, añade el tenista galo a pocos días de que arranque el primer torneo grande del año, el Open de Australia.

Simon también denuncia las banalidades que se dicen en los medios en vísperas de partidos intrascendentes de primeras rondas de los torneos. Entre ellas las frases que suele utilizar Rafa Nadal: “Cuando Rafa [Nadal] te dice que tiene miedo de enfrentar a un wildcard en la primera ronda de Roland Garros, sabes que te está tomando por idiota. Y la prensa podría escribir eso, en lugar de hablar de humildad, valores, y bla-bla-bla. El sistema te obliga a hacer ese tipo de comentarios. Aunque, en mi opinión, sería casi menos violento si dijera “le voy a reventar” en lugar de optar por un “estoy preocupado”.

El galo no deja títere por cabeza, aunque asume situaciones que se viven en torneo como las del pasado Open 500 de Valencia donde se sucedieron resultados ‘sospechosos’. “No lo voy a esconder, en Valencia, no me empleé a fondo, está claro [sonríe]. Pero quería jugar pasara lo que pasara. Como me había retirado en Tokyo anteriormente, estaba obligado. La regla te obliga a jugar un torneo 500 después del US Open. Hice el cálculo: abandonar me hubiera hecho perder 270 puntos. Fui a ver a la ATP y les dije que aunque tuviera una pierna escayolada, saltaría a la pista. Es una tontería, pero el reglamento está podrido”. Bien servido se ha quedado el galo que casualmente perdió su primer partido de esta campaña en el torneo de Brisbane la pasada semana ante el 147 del mundo, Marius Copil, por 7-5 6-3. Ojalá tenga suerte en Australia tras su deshaogo mediático.

 

 

Porque solo la bola amarilla tiene la razón

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