Nada, que no nos vamos a meter con Bob Dylan, es solo que, si la semana pasada Django desencadenado nos devolvía las magistrales canciones de Jim Croce, hoy viendo El lado bueno de las cosas ha surgido entre las diversas canciones de la película Girl From the North Country, de Bob Dylan. Se trata de la canción que abría su disco de 1969 Nashville Skyline, una de las más emotivas de su gigantesca carrera. Y que no sólo sorprende por estar cantada a medias con Johnny Cash: es que el que no es Johnny Cash tampoco parece Bob Dylan.
El bardo de voz nasal, apegado hasta entonces a las letanías de tono agudo y reinvindicativo, parecía transformado en este disco cantado de forma más suave y grave, lo que da la oportunidad a quienes tienen especial manía a su forma habitual de cantar (que los hay), de disfrutar del Dylan más country y melódico como nunca hubieran pensado. Un disco breve (27 minutos) y sencillo que también contiene otras bellas y legendarias canciones: Lay Lady Lay y I Threw It All Away, entre ellas…