Londres es una ciudad que recibe miles de turistas cada día, y con motivo de los Juegos Olímpicos que hoy mismo concluyen, muchos más. Hace pocos días la plusmarquista mundial de salto con pértiga, Yelena Isinbayeva, dejó bien claro que estos Juegos Olímpicos no le transmitían lo que otros. “Si dejas la villa olímpica, tienes la impresión de que nada está sucediendo en Londres” declaró la rusa. Es cierto que muchas zonas de la ciudad están adornadas con banderas y otros elementos que indican que los Juegos Olímpicos se están disputando, pero también es innegable que en otras muchas zonas, barrios… no hay ninguna señal de que el mayor evento deportivo esté celebrándose. Además, muchos londinenses han abandonado su ciudad durante estos Juegos.

De hecho, en la capital británica existen movimientos en contra de los Juegos Olímpicos. El día de mi llegada tuve la ocasión de ver uno bastante numeroso cerca del aeropuerto de Heathrow. Aunque supongo que será algo normal.

Lo que sí que me llamo la atención fueron algunos edificios situados junto al parque olímpico y al estadio ExCel. Ya sabía que barrios cercanos a Stratford habían criticado y mucho la construcción del Estadio Olímpico cerca de sus hogares. Se sentían abandonados por el ayuntamiento. Una inversión tan grande en la zona olímpica, y barrios situados a apenas un kilómetro de distancia completamente olvidados, zonas marginales de Londres que realmente necesitan ayuda del ayuntamiento para evolucionar un poco.

Cerca del ExCel, la cosa es parecida. Este recinto que ha albergado diferentes deportes no está precisamente bien comunicado. Llegar puede convertirse en un suplicio. Pero una vez allí, el estadio es asombroso. Pero ¿qué hay a su alrededor? En el vídeo se puede ver que no es oro todo lo que reluce, ni siquiera en unos Juegos Olímpicos.