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Lorenzo Mejino

Series para gourmets

Wings ( Dos en el Aire). La gran comedia olvidada de los creadores de Frasier

En cualquier lista de las mejores comedias de la historia aparecen en un lugar preferente “Cheers” y su secuela “Frasier”, donde el trío de guionistas formado por David Angell, Peter Casey y David Lee fueron parte fundamental tanto en el desarrollo de la primera como en la creación y durante todo el recorrido de la segunda.

Sin embargo, la primera comedia que crearon en solitario entre ambas obras maestras, “Wings”, nunca ha tenido el reconocimiento de sus dos compañeras, a pesar de estar ocho temporadas en antena y descubrir un grupo de actores y guionistas que en su gran mayoría han triunfado posteriormente en sus carreras posteriores.

A medio camino entre la clase baja de la parroquia de “Cheers” y el elitismo snob de “Frasier”, “Wings” tenia unos personajes trabajadores de clase media que se relacionaban en un pequeño aeropuerto, con todas las señas de identidad y diálogos brillantes,marca de la casa y que creemos que merece que rompamos una lanza en favor de su reconocimiento en favor de la gran comedia que era y  que encima ha envejecido mucho mejor de lo que cabía esperar.

Ficha: Wings 172 episodios.   Abr 1990-May 1997. Cadena: NBC (USA)- Antena 3 (E)

Sinopsis:  Joe Hackett es el propietario de la pequeña aerolínea Sandpiper, que con su única avioneta realiza vuelos regulares entre Boston y la isla de Nantucket, donde tienen su base de operaciones. Joe es un piloto responsable y meticuloso que se ve obligado por deseo de su padre a hacer las paces con su hermano Brian, un bala perdida con el que llevaba peleado muchos años por haberle robado su novia.

La serie comienza con el reencuentro de los dos hermanos para trabajar conjuntamente a pesar de los enormes problemas que tienen entre ambos, junto con las historias del resto de trabajadores del pequeño aeropuerto, que incluyen a los encargados de facturación, mecánicos, taxistas, camareras y las aerolíneas rivales

El inicio: Tres guionistas de diferentes orígenes y trayectorias David Angell (izq), Peter Casey (cent) y David Lee (der) se conocieron en la sala de guionistas de “Cheers”, donde hicieron grandes migas, y fueron subiendo en el escalafón de la serie hasta el punto de ser nombrados los showrunners de la serie, de la 4T a la 7T, los mejores años de esa gran serie, donde lidiaron con gran maestría con la muerte real de Nicholas Colasanto y la marcha de Shelley  Long de la serie.

El trío aspiraba a crear sus propias series y decidieron dejar “Cheers” en 1989, para crear una productora y empezar a buscar ideas.

El concepto de partida lo tenían claro, ya que buscaban hacer una comedia en un lugar de paso donde los personajes fijos tuviesen la posibilidad de interaccionar cada semana con nuevos personajes, tras barajar diversas opciones, pensaron que un pequeño aeropuerto podía ser un lugar ideal para enmarcar sus historias.

Presentaron la idea al presidente de la NBC el todopoderoso Brandon Tartikoff, que la aprobó con bastantes reparos, porque no veía lo del aeropuerto muy claro, pero les dio la luz verde para escribir el piloto. La ubicación del aeropuerto fue la inspiración de David Lee, que en un viaje particular a la isla de Nantucket cerca de Boston, le encantó el minúsculo aeropuerto y lo propuso a sus compañeros como sede oficial de la serie.

De todas formas el camino no fue fácil, porque el piloto fue rechazado por flojo y les obligaron a reescribirlo por completo centrándose mas en la historia principal, en lugar de ser una mera presentación de los personajes.

Para dirigir el piloto recurrieron a su viejo amigo, James Burrows, el maestro de la dirección de sitcoms, que les ayudo a encontrar el tono necesario y les valió un encargo para una pequeña temporada de prueba de seis capítulos estrenándose en Abril de 1990- Tuvo una gran acogida por parte de las audiencias ( mas de veinte millones de espectadores por episodio) e incluso de la crítica, lo que le valió su renovación para una 2T, incluida en la programación otoñal de la NBC entre “Cheers” y “Seinfeld” en una posición ideal.

Tres años mas tarde, el trío creó la secuela de “Cheers” , “Frasier” que les colocó en el pedestal de los guionistas, con innumerables premios Emmy en su poder, solo enturbiados por la trágica muerte de David Angell en los atentados del 11-S, cuando iba con su mujer en el primer avión que se estrelló en las Torres Gemelas.

Sus dos compañeros siguieron hasta el final de “Frasier”, pero luego se retiraron con siete Emmys en su poder cada uno y sin volver a escribir ningún guión más.

La trama: “Wings” estaba planteada como una comedia de las que en ingles se denominan “Workplace comedies” centradas en el lugar de trabajo de una serie de personajes que tienen en común el lugar donde pasan mas horas al día, en este caso un aeropuerto.

Una diferencia importante frente a otros ejemplos del genero como “Taxi” es que los personajes pertenecen a diferentes empresas que comparten el mismo espacio físico, por lo que no  tenemos las relaciones jefes/subordinados que son las habituales en las series que se desarrollan en las oficinas de una empresa.

De esta manera teníamos diferentes empresas con diferentes intereses que coinciden en el mismo espacio físico, donde algunas compiten y otras se complementan, enriqueciendo las posibilidades de las historias.

“Wings” tenía como personajes centrales la pareja de hermanos Hackett, que se vuelven a reunir tras una especie de jugarreta de su difunto padre que les obliga a reconciliarse como paso previo a heredar una gran suma de dinero, que nunca ha visto nadie.

Sus cuitas y peleas para intentar gestionar su minúscula aerolínea “Sandpiper Inc” de una sola avioneta, con la precariedad que conlleva depender de un solo aparato para todo su negocio, son la parte del león de la serie, acentuadas por las diferentes personalidades de ambos hermanos así como su forma de enfrentarse a la vida y al trabajo .

La poética cabecera de la serie, con música clásica de Schubert, es la recreación de vuelo habitual de la avioneta entre Boston y Nantucket, con los títulos de crédito sobreimpresionados.

El tercer personaje principal era Helen, la atractiva encargada del bar del aeropuerto, cuyo sueño era tocar el cello en una gran orquesta, pero que hasta conseguirlo debe malvivir dando clases de música y sirviendo bebidas en el aeropuerto. Desde el principio se establece una gran tensión sexual entre Helen y Joe el hermano serio, con Brian metiendo baza y molestando de vez en cuando, con diálogos con dobles y triples sentidos entre el trío principal, como pueden comprobar en el siguiente vídeo

Los personajes secundarios servían para complementar al trío protagonista y permitir mayor juego en las tramas como en el caso de Lowell, un mecánico brillante en su trabajo pero no demasiado espabilado, pero que al ser el único del aeropuerto, sus habilidades son objeto de grandes pugnas entre los hermanos Hackett y Roy el propietario de la empresa rival Aeromass.

Roy es el típico villano simpático que a pesar de gestionar una aerolínea mucho mayor que la de los hermanos,  no ceja en intentar hacerlos quebrar con todos los medios a su alcance, con escasa fortuna como se pueden imaginar y ver en el siguiente vídeo

El elenco lo completaban Fay, una azafata retirada que era la única empleada de la aerolínea de los hermanos y que se encarga de lanzar frases punzantes y cortantes de una sola linea a todo el mundo y a partir de la 3T, se añadió el gran Antonio, un taxista de origen italiano, atolondrado y muy romántico que proporcionaba escenas tan divertidas como la siguiente:

La serie funcionaba perfectamente con episodios independientes centrados en algún aspecto de la vida personal o laboral de los dos hermanos con las crisis de la compañía que servían como un cierto hilo de continuidad, junto a la presencia de “running gags” para todos y cada uno de los personajes como ya sucedía en “Cheers”, con su mítico “NOOOOORM”, como mejor ejemplo.

Al transcurrir en el mismo universo que “Cheers” o “Frasiers”, los guionistas no dudaban en recurrir a personajes de ambas series para enviarlos en avión a Nantucket con cualquier excusa. El mejor episodio fue un viaje de Frasier y su mujer Lilith, a la isla, donde se pueden imaginar de todo lo que se quejaban y mas en semejante entorno alejado de todo lujo y distinción.

La serie se estabilizó rápidamente, basando su comicidad en los fulgurantes diálogos entre los personajes, mas que en hacer grandes evoluciones de los mismos, un poco siguiendo el ejemplo de la serie madre, “Cheers”, donde todos se reían de todos utilizando sus virtudes y flaquezas de todas las maneras posibles.

Con el paso de las temporadas, de vez en cuando se permitían alguna licencia en forma de capitulo especial para que los actores pudieran salir de su registro habitual, como es el caso del siguiente corte donde pueden ver al hermano tarambanas imitar a James Bond en su subconsciente.

“Wings” era una serie que funcionaba como un mecanismo de relojería, pero a la que siempre le faltó un punto de brillantez para encaramarse al olimpo de las comedias, a lo que hay que añadir la mala suerte que tuvo al coincidir en el tiempo con la época dorada de varias comedias, lo que la dejaba fuera del reconocimiento incluso en forma de nominaciones de los Emmys.

La marcha de sus creadores del día a día de la serie a partir de la 3T, para concentrarse en la fabulosa “Frasier”, dejó la serie en manos de jóvenes guionistas, como Steven Levitan o David Lloyd, que aprendieron el oficio con gran destreza, como muestran el éxito de sus series actuales como “Modern Family”, por lo que también funcionó como escuela de grandes guionistas.

Siempre fue una comedia que me gustó mucho desde sus inicios, aunque era bastante complicado seguirla por los cambios intempestivos de emisión de Antena 3, que hacía que mi grabadora se volviera loca en muchas ocasiones.

Su carácter atemporal tanto de gags como de ambientación aeroportuaria, ha hecho que envejezca mucho mejor que otras de su época, porque muchos problemas laborales ( retrasos, averías, cancelaciones, mal tiempo) siguen siendo vigentes en nuestros días, ademas de ver a muchos actores en sus primeros papeles tanto protagonistas como de estrellas invitadas, como es el caso de un imberbe Matthew Fox, en uno de sus primeros papeles.

Los actores: Es difícil que ninguno de ustedes no reconozca a Steven Weber (izq) o Tim Daly ( der) de verlos en innumerables series televisivas durante los últimos veinte años, pero para ellos todo empezó como los hermanos Brian y Joe Hackett en este pequeño aeropuerto de Nantucket.

Tim Daly era Joe el hermano serio y responsable, muy atraído por Helen, al que su hermano le sacaba de quicio en muchas ocasiones. Daly era un desconocido que había trabajado principalmente en teatro y solo había aparecido en una serie maldita “Almost Grown”, creada por David Chase, hasta que fue elegido para el papel que le catapultó a la fama.

Dotado para el drama y la comedia, Daly se destapó con este papel y tras la serie no ha parado de trabajar en todo tipo de programas como “Los Soprano”, “El Fugitivo”, “Sin Cita Previa” o en la actualidad en “Madame Secretary”, convirtiéndose en un rostro muy conocido.

No le va a la zaga Steven Weber, como el gamberrete Brian Hackett que era el mas divertido, en su primer papel protagonista tras aparecer en minúsculos roles durante la década de los ochenta. Posteriormente ha aparecido en numerosas series en papeles recurrentes de diversos episodios, a medio camino entre los protagonistas y las estrellas invitadas, casi siempre como antagonista principal de los protagonistas durante varios episodios, como hemos podido ver recientemente en “Izombie”, donde siempre aporta un punto de cinismo a sus personajes que les encanta a los productores para este tipo de papeles.

Mucho mas extraña ha sido la carrera de Crystal Bernard, una rubia texana que se convirtió en uno de los símbolos sexuales de los noventa, gracias a su papel de Helen, una camarera a disgusto que solo deseaba escapar de ese aeropuerto y centrarse en su vida, aunque su atracción por Joe no le va a facilitar las cosas, lo que le valió una gran popularidad en esa época, incluso en su faceta como cantante.

Al finalizar la serie, en la cresta de su popularidad y por razones que desconozco desapareció de la escena con apenas dos o tres películas pasteleras navideñas en su haber y algunas obras teatrales, en un fenómeno digno de estudio.

El caso contrario sucedió con Thomas Haden Church, que encarnaba al mecánico de pocas luces Lowell, otro de los personajes mas divertidos de la serie en su debut televisivo. Fue el primero en abandonar la serie tras la 6T, temeroso de encasillarse en un papel de tontorrón para toda su vida, y lo primero que hizo fue aceptar una comedia de tono mas sofisticado “Ned & Stacey” junto a Debra Messing, durante dos temporadas.

De allí dio el salto al cine, haciendo de villano o de secundario gracioso, hasta que participó en el gran éxito que fue “Entre copas”, que le valió una nominación al Oscar como mejor secundario, tras el cual ha seguido trabajando en numerosas películas o miniseries como “Broken Trail”

Nunca vienen mal dos actores secundarios y muy solventes para apuntalar esos pequeños papeles que toda serie necesita y en este caso David Schramm y Rebecca Schull eran ideales para interpretar al dueño de la aerolínea rival y a la empleada manipuladora y mas lista que el hambre de la pequeña compañía aérea. Schramm es un actor que ha trabajado toda su vida en el teatro en todo tipo de papeles, excepto este papel televisivo que es el que le ha hecho mas famoso como el malvado de la serie y un consumado robaescenas.

Rebecca Schull es uno de esos casos de actrices que tras haber trabajado mas bien poco en su juventud, encuentra en su madurez su mejor época, empezando con el papel de Fay, al que han seguido numerosos papeles de persona mayor ya sea de forma recurrente como en “Suits”, como fija como en “Chasing Life” y a sus 87 años, me ha sorprendido incluso verla en la última serie de Woody Allen, “Crisis in six scenes”.

Otro rostro muy conocido en la actualidad es el gran actor de origen libanés Tony Shahloub, que tuvo su gran oportunidad en esta serie como el atolondrado taxista italiano Antonio, que fue el último en entrar al núcleo principal, pero que se convirtió en uno de los favoritos de todo el mundo, incluyendo a un servidor.

Tras la serie Shalhoub, dirigió sus pasos al cine, donde apareció en varios éxitos taquilleros como “Estado de Sitio” o “Men in Black” hasta volver a la televisión en una serie “Stark raving Mad” junto a Neil Patrick Harris y creada por Steven Levitan, que no pasó de la primera temporada.

Su siguiente papel fue mucho mas fructífero como el detective aquejado de un trastorno compulsivo Adrian Monk, en la serie “Monk”, que le valió tres Emmy al mejor actor por su impresionante interpretación de un maniático detective que resolvía los casos mas complicados. Tras “Monk” lo hemos visto en la última temporada de “Nurse Jackie” y sobre todo este verano en un delirante papel como un senador descerebrado en la joya que ha sido “Braindead”.

El Final:
“Wings” es una serie que como sus dos primas hermanas, finalizó su recorrido cuando sus creadores lo creyeron conveniente, esquivando la guillotina de la cancelación. Al finalizar la 7T, en una reunión entre los creadores y la cadena NBC, decidieron anunciar la renovación para un 8T y última temporada para dar carpetazo final a la serie.

El último episodio de la serie fue una verdadera delicia del que deberían aprender muchos creadores actuales para dar satisfacción a sus seguidores. En este sentido cerraron el circulo que se inició en el primer episodio, con el tema de la herencia de su padre, que siempre había sido como un gag recurrente, de la que todos hablaban pero nadie había visto.

Resolviendo ese tema, ya tenían la posibilidad de iniciar todos los protagonistas un nuevo capitulo de sus vidas o de ver su merecido castigo los que no se lo merecían , en uno de los mejores y mas elegantes finales que recuerdo de una sitcom, pero que como el resto de la serie ha caído en un olvido total.

Epílogo: Hoy hemos dedicado nuestro espacio para reivindicar una de las grandes comedias del siglo pasado “Wings”, que siempre pasó bastante desapercibida por el mayor fulgor mediático de sus compañeras de parrilla televisiva, pero muy divertida y hecha con una solvencia y profesionalidad a prueba de bomba como les hemos querido recordar en el presente articulo.

Esperamos sus opiniones y comentarios, aquí o en nuestra cuenta de twitter (@lmejino). Hasta la próxima

Lorenzo Mejino

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Sobre el autor

Series para gourmets nace con la pretensión de ayudar a personalizar su menú televisivo con el panorama mundial de series. Cada lunes hablaremos de series remotas ni estadounidenses ni británicas, no estrenadas en nuestro país. Cada miércoles de series actuales estrenadas aquí y los viernes recordamos series del pasado de la televisión

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