Ayer no me lo podía creer. Estando con mi mujer y mis hijos llamaba a mi padre para saber qué tal le había ido la subida en la que estaba participando y cuando me decía, “¿no sabes lo que ha pasado?”… me imaginé lo peor para algún piloto amigo porque el tono era parecido al que usó cuando me dijo lo de Lionel hace casi un año. “Georg Plasa se ha matado en Rieti…”. Me quedé helado, es terrible. Menudos años…
A Georg Plasa yo no le conocía tanto como mis padres, de hecho ellos estuvieron con él en la Subida al Fito y en Falperra este año. Al volver de allí en su viaje de vuelta hacia Alemania, cenó en Hondarribi con mis padres y durmió en Donosti, ciudad que no conocía y que le encantó.
Georg Plasa era un piloto alemán de 51 años de edad que había dedicado su vida a las carreras en general y a las subidas de montaña en particular. Siempre con BMW como marca de sus coches que fue modificando para llegar a construir los turismos más rápidos de montaña disputando la clase E2SH (siluetas) en la que se enfrentaba a otros pilotos como Meisel, Ianello y otros. Su BMW era una auténtica joya, un coche con motor de F1, control de tracción, cambio en el volante, peso reducido…
Plasa fallecía tras darse un golpe a escasos metros de la meta. Auténtica mala suerte, en una larga curva de derechas tras una izquierda rapidísima Plasa se fue contra el talud situado a la izquierda. Fue trasladado en helicóptero a un hospital de Roma pero todo fue en vano.
Plasa se une a un gran número de pilotos habituales del europeo de montaña fallecidos en carrera en los últimos años: Fabio Danti, Adriano Parlamento, Miroslav Fajkus, Lionel Regal… Sin olvidarnos de un habitual de las subidas de nuestra región que también perdió la vida hace 5 años; Josu Ugarte.
Los pilotos allí presentes muy afectados por lo ocurrido decidían junto a la organización de la prueba suspender la misma.