Asier Minondo
La crisis de la Covid-19 ha mostrado que una medida de confinamiento en un país situado a miles de kilómetros de distancia puede provocar la paralización de un proceso de producción en el País Vasco. El Informe de Competitividad del País Vasco, realizado por Orkestra-Instituto Vasco de Competitividad, y que se presenta hoy, incorpora un recuadro en el que analizo, junto a mis coautores, Juan de Lucio, Raúl Mínguez y Francisco Requena el grado de vulnerabilidad de las empresas vascas a disrupciones en las cadenas de suministro globales.
Siguiendo una metodología similar a la de Cernat y Guinea (2020), calculamos el número de países de los que una empresa vasca importa un producto. Para realizar este cálculo, utilizamos datos del Departamento de Aduanas, y definimos un producto como un código de 8 dígitos de la Nomenclatura Combinada (aproximadamente 9.000 productos). En 2019 la mediana de las empresas vascas solamente tenía un país suministrador para cada producto importado y la media de países suministradores por producto era de 1,5. Este resultado indica que las empresas vascas son muy vulnerables a problemas en el país suministrador. En España, la mediana de las empresas también tenía un solo país suministrador por producto, y la media era de 1,6.
La dependencia es similar entre las empresas que importan y exportan, y las empresas que solamente importan. En las primeras el número medio de países suministradores por producto es de 1,5, mientras que en las segundas es de 1,4. En España, las medias se sitúan en 1,8 y 1,3, respectivamente. Los países que más se repiten como únicos suministradores son China (21%), Alemania (16%), e Italia (11%). Durante el primer semestre de 2020, que incluye los cuatro meses en los que estuvo en vigor el primer estado de alarma, la mediana de países suministradores por empresa y producto se mantuvo en uno, y la media se redujo a 1,3.
Para medir la vulnerabilidad del País Vasco respecto a un único país suministrador, sumamos el valor de las importaciones de aquellos productos en los que las empresas vascas tienen un único suministrador y dividimos esta suma entre el total de las importaciones vascas en 2019. El 22% de las importaciones vascas tuvieron un único país suministrador, y la mitad de las importaciones vascas se originaron en tres o menos países suministradores. En España, la dependencia de un único país suministrador se situó en el 19%. La dependencia del País Vasco se agudiza durante el primer semestre de 2020: el porcentaje de importaciones que provienen de un solo país se eleva al 33% y casi el 50% de las importaciones proviene de dos países o menos. En todo caso, estos porcentajes no se pueden comparar con los de 2019, ya que solamente incluyen los seis primeros meses.
El Gráfico 1 presenta el grado de dependencia en los diez capítulos de importación más importantes del País Vasco, excluyendo los combustibles. Estos capítulos representan el 64% de las importaciones vascas de bienes. Para cada capítulo también se muestra el país suministrador único que más se repite entre las empresas importadoras. En la mayoría de los capítulos, la dependencia de un suministrador único se sitúa alrededor del 30% de las importaciones. La mayor dependencia se produce en otros productos químicos, 86%, y la menor en caucho y sus manufacturas, 14%. La dependencia también es baja en el sector del automóvil (16%). Alemania y China son los países suministradores que más se repiten.
Nota: La dependencia se calcula como el porcentaje del total de importaciones en los que la empresa importadora tiene un único suministrador por producto. Fuente: cálculo de los autores a partir de los datos del Departamento de Aduanas.
El Gráfico 2 muestra la evolución de la dependencia de las importaciones vascas de un solo país suministrador para tres categorías de importadores: todos los importadores, empresas importadoras pero que no exportan, y empresas que importan y exportan. Durante el periodo 1997-2020, la dependencia de las empresas que exportan e importan es inferior al de las empresas que solamente importan. Entre 1997 y 2019 se observa una reducción en la dependencia de un solo país suministrador para las tres categorías de importadores. En 2020 se produce un crecimiento en la dependencia en las tres categorías de importadores.
Es probable que la crisis de la Covid-19 impulse a las empresas vascas a diversificar su cartera de suministradores. Como señalan Díaz-Mora y otros (2020), es probable que estos nuevos suministradores se ubiquen en países geográficamente cercanos y que participen en los mismos acuerdos comerciales, para responder rápidamente a posibles cambios en la demanda y reducir el riesgo de que se alteren las reglas de comercio. En todo caso, encontrar nuevos suministradores no es una tarea sencilla, especialmente en aquellos casos en los que los productos intermedios se tienen que adaptar a las características de la empresa importadora.