El viernes 11/6/21 participamos desde Orkestra en una sesión temática sobre campeones ocultos en la conferencia “Regions in Recovery” (para ver los slides que utilizamos, pincha aquí). Presentamos los resultados de un nuevo estudio sobre líderes en nichos de mercado internacionales (INMLs) para el caso de España. En dicho estudio analizamos: la ubicación geográfica de las empresas en cuestión (si se encuentran en partes centrales o periféricas del país), si siguen pautas generales de urbanización (si se ubican en ciudades grandes con supuestas ventajas de aglomeración) y si muestran continuidad o no en cuanto a su propiedad (si los dueños de las empresas son sus fundadores o si esto cambió a lo largo del tiempo).
Planteamos estas cuestiones ante la creciente terciarización de la economía y cómo la misma tiende a contribuir a un proceso de urbanización y centralización de mercados laborales, por lo menos en cuanto a las actividades de servicios con alto valor añadido y/o los llamados servicios intensivos en conocimiento se refiere, concentrándose en las ciudades de mayor tamaño. Lo anterior se traduce en el caso de España que su industria está perdiendo peso y que sus actividades económicas en general se tienden a concentrar en las grandes ciudades.
Ante este telón de fondo, el siguiente mapa enseña la distribución de los INMLs españoles por el territorio, dejando claro que no están concentrados en la capital o las grandes urbes del país. Es más: alrededor del 70% de los casos se encuentran a un mínimo de 4 horas en carretera de Madrid, tomando el trayecto más rápido en coche. Esta observación concuerda con hallazgos de estudios sobre el mismo tipo de empresas en Alemania y la distribución de las mismas por dicho país.
En términos del tamaño de la ciudad donde se hallan los INMLs, observamos que más del 70% se encuentran en ciudades o pueblos con menos de 50.000 habitantes. Como tal, estos hallazgos están también en línea con los resultados de los estudios que se han realizado sobre campeones ocultos alemanes.
Por lo tanto, y aunque las zonas rurales y/o ciudades de tamaño medio y pequeño pueden jugar con desventaja en un contexto de terciarización y urbanización, vemos que ‘mantienen el tipo’ en términos de representar el hábitat por excelencia de los INMLs. Si analizamos donde se observan las mayores concentraciones, vemos que éstas se encuentran en el cuadrante Burgos-Tudela-Irún-Bilbao, en el triángulo de las comarcas catalanas Anoia-Vallés Occidental y Oriental y en la provincia de Castellón. A nivel de Comunidades Autónomas, Euskadi, Navarra, La Rioja y Cataluña tienen las ratios de INMLs por millón de habitantes más altas.
Entre los factores que explican donde encontramos los epicentros de líderes de nicho, podemos indicar los siguientes:
Cuando nos fijamos en el tema de la propiedad de los INMLs, vemos que el número de casos donde se cambia de propietario mayoritario (“transacciones”) aumenta en el tiempo. Como se ve en el siguiente gráfico hay sobre todo una intensificación de este proceso a partir de 2010.
En su conjunto, constatamos que más de un tercio de los INMLs han cambiado de manos, y en algunos casos esto ocurrió en más de una ocasión. En más del 70% el nuevo accionista mayoritario tiene nacionalidad extranjera. En cuanto al carácter del mismo, encontramos notablemente fondos de inversión (internacionales y nacionales) y sobre todo actores industriales (competidores directos o no).
Las conclusiones de nuestro estudio apuntan al hecho de que los INMLs forman un activo firme en cuanto a su ubicación para las ciudades y zonas periféricas y/o rurales, y que pueden ayudar a frenar el avance de la temida “España vaciada”. No obstante, para que eso siga siendo así, la propiedad de dichas empresas puede ser un factor clave, y a este respecto observamos que hay concentraciones regionales donde las empresas cambian más de manos que en otras. Como tal, estos epicentros pueden convertirse en “plataformas de filiales”, conjuntos que pueden sufrir a la larga de una falta de soberanía y de una pérdida de centros de decisión.
Bart Kamp