@jonmizabala

El pastoreo contribuye a afrontar los retos actuales de nuestra sociedad como el cambio climático, la demografía, la economía local o la diversidad cultural. Las pastoras y los pastores son gestores y conservadores de la ruralidad, de nuestros territorios, de la biodiversidad animal, vegetal y alimentaria, de nuestra alimentación, y de nuestra identidad y nuestra cultura. Sin embargo, la ausencia de un recambio generacional y la creciente separación entre el mundo urbano y el mundo rural representan serias amenazas para la sostenibilidad del pastoreo, y con ello, para la sostenibilidad de nuestro medio ambiente, además de nuestra alimentación, tradición, identidad y culturas (por mencionar algunas de las consecuencias que tendría la desaparición total de la actividad pastoril). Las cifras son efectivamente preocupantes. En 2020, había en Euskadi 12.919 explotaciones agrarias, un 21,8% inferior a las censadas en 2009 (16.519 explotaciones agrarias), según el Censo Agrario elaborado por Eustat.

Este año 2022, Artzain Eskola, la Escuela de Pastores del País Vasco, está celebrando su 25 aniversario, y no podíamos pasar por alto este hito tan especial y que tanto representa para la conservación, diversidad y bienestar de todos los ciudadanos de Gipuzkoa. La historia de Artzain Eskola se remonta al año 1950, cuando los franciscanos de Arantzazu compraron Gomiztegi, un caserío situado a unos 3 kilómetros del Santuario de Arantzazu, y localizado en el Parque Natural de Aizkorri.

En 1997 surge Artzain Eskola Gomiztegi, con el objetivo de aumentar el grado de profesionalidad del pastor/a. Artzain Eskola fue una iniciativa pionera, al ser la primera escuela de pastoreo que se constituyó en todo el estado. De manera anual, en esta escuela se forma a personas que deciden desarrollar su futuro profesional en el sector ovino y caprino, además de capacitar a otras que ya se encuentran ejerciendo la profesión y que quieren actualizar su formación en temas fundamentales para el sector como la digitalización, la tecnificación, la producción ecológica o las terapias alternativas. Esta instrucción, tanto teórica como práctica, incluye no sólo la formación en la gestión de los rebaños o en la generación de alimentos de calidad, sino también en la gestión del territorio, en la gestión y mantenimiento de las montañas y de la biodiversidad (animal y vegetal) y en potenciar la importancia de la ruralidad. Es decir, Artzain Eskola ofrece un conocimiento integral y sistémico de todo el proceso (desde el animal hasta la venta de derivados lácteos, pasando por el medio ambiente) y una transmisión de la contribución ecosistémica que tiene el sector para el resto de la sociedad.

En estos 25 años, Artzain Eskola ha sido y sigue siendo un espacio de reflexión sobre el pastoreo y sobre el rol que tiene el primer sector en nuestra sociedad. En ella se ha formado a más de 300 personas en este periodo de tiempo, y esperemos que sean muchas más las que opten por esta vía de desarrollo profesional. Artzain Eskola sigue estando ubicada en Arantzazu. Se trata de un lugar con un significado simbólico muy especial por su valor espiritual, cultural y paisajístico. Hoy más que nunca, el reto medioambiental al que nos enfrentamos exige poner en valor el rol del pastoreo y de la ruralidad, y reconocer la fundamental labor que se está ejerciendo desde Artzain Eskola. ZORIONAK ETA MILESKER!

Si te interesa y quieres saber más sobre este problema estructural al que nos enfrentamos como civilización, y a todas las iniciativas que se están impulsando en este sentido desde Gipuzkoa, el próximo 26 de octubre estaremos debatiendo sobre ello en el Kursaal de Donostia-San Sebastián, dentro de la quinta edición del congreso Gure Lurra – Sembrando Futuro. ¡Allí nos veremos!

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