@InakiErauskin
Decía Benjamin Franklin, uno de los padres fundadores de los Estados Unidos, inventor y muchas más cosas, que en este mundo no hay nada seguro, salvo la muerte y los impuestos. El Impuesto sobre la Renta de la Personas Físicas (IRPF) es el impuesto más importante de la recaudación fiscal en nuestro entorno, si bien las cotizaciones sociales, que no son impuestos, ocupan un lugar más importante en cuanto a los ingresos públicos (31,5% del total recaudado; IRPF e IVA recaudan el 56,6% del total).
Hace tiempo escribí un post sobre la distribución del IRPF en Gipuzkoa. En este post me centraré en quién “sufre” la carga del IRPF. El Gráfico 1 muestra los tramos de la base liquidable del IRPF (eje horizontal) y su recaudación impositiva en términos relativos sobre el total recaudado (eje vertical izquierdo, en bloques azules) en Gipuzkoa en 2021, a partir de los datos de la Diputación Foral de Gipuzkoa. La base liquidable es igual a la base imponible (rentas obtenidas menos cotizaciones sociales aproximadamente) menos las reducciones de la base imponible (aportaciones a EPSVs, …). Se presentaron 390.988 declaraciones en 2021, la base liquidable total fue de 10.776,457 millones de euros (el PIB de Gipuzkoa fue de 26.037,448 millones de euros en 2021) y la cuota líquida fue de 2.011,612 millones de euros (casi un 8% del PIB). La cuota líquida es la cantidad que resulta de aplicar a la base liquidable el tipo de gravamen que le corresponde menos las deducciones (por vivienda, hijos/as, …). En el Gráfico 1 se puede observar que el tramo superior con bases liquidables de más de 180.000€ (que son 1.542 declaraciones y suponen un 0,39% de las declaraciones totales) ingresaron el 10,67% de la cuota líquida total, esto es, 214,546 millones de euros. Además, el 10,73% de las declaraciones que suponen a partir de 44.400 euros contribuyen al 44,84% de la cuota líquida total. A su vez, las declaraciones hasta de 25.200€ que suponen el 50,62% de las declaraciones totales ingresan el 14,37% del total recaudado. Y, finalmente, los tramos centrales desde 25.200€ hasta 44.400€ euros, que casi suponen el 40% de las declaraciones corresponde, también, a casi el 40% de la recaudación.
Fuente: DFG.
En el Gráfico 1 se puede observar, también, el tipo medio de gravamen de cada tramo, calculado como el cociente de la cuota líquida sobre la base liquidable, representada con una línea continua naranja. La media del tipo medio de gravamen es del 18,67% y se aprecia la tendencia claramente creciente, como cabe esperar, por la progresividad del IRPF, hasta alcanzar un tipo medio de gravamen máximo de 32,32% (el tipo marginal máximo en Gipuzkoa es del 49% a partir de una base liquidable de 199.240€ en 2023). Todas las cifras anteriores se parecen bastante a las publicadas recientemente por el Banco de España y citadas por Francisco de la Torre, economista, inspector de Hacienda del Estado y ex-diputado (por Ciudadanos).
Teniendo en cuenta todo lo anterior, un pequeño “experimento” nos da el alcance potencial del IRPF. Si aumentara (disminuyera) un 1% el tipo medio de gravamen de forma proporcional, manteniéndose el resto constante (en realidad no se mantiene, pero por eso es un experimento), entonces aumentaría (disminuiría) la recaudación en unos 108 millones de euros aproximadamente. Si solo se gravara a las rentas mayores de 44.400€ se acercaría a los 50 millones de euros.
Conviene tener estos datos (y más) en cuenta cuando se oyen voces un tanto disparatadas sobre los impuestos y especialmente cuando se plantean reformas impositivas.
Se atribuye a Oliver Wendell Holmes, juez del Tribunal Supremo de Estados Unidos, que “Los impuestos son el precio que pagamos por la civilización”.
Pues eso.
@InakiErauskin