ATERRIZA COMO PUEDAS
Título original: Airplane!
Año: 1980
Duración: 88 minutos
País: Estados Unidos
Director: Jim Abrahams, David Zucker y Jerry Zucker
Guion: Jim Abrahams, David Zucker y Jerry Zucker
Música: Elmer Bernstein
Fotografía: Joseph Biroc
Reparto: Robert Hays, Julie Hagerty, Leslie Nielsen, Lloyd Bridges, Peter Graves,Robert Stack, Lorna Patterson, Kareem Abdul-Jabbar, Stephen Stucker, Lee Bryant,Ann Nelson, Barbara Billingsley, Joyce Bulifant, Frank Ashmore, Al White,Norman Alexander Gibbs, Mary Mercier y Ethel Merman
Productora: Paramount Pictures
Género: Comedia
El vuelo 209 de la Trans American sale de Los Ángeles con destino a Chicago. Entre el pasaje se encuentran una serie de curiosos personajes. Entre ellos, un ex-piloto de combate que, en pleno vuelo, se verá obligado a hacerse con el mando del avión comercial, tras quedar los pilotos indispuestos por una comida en mal estado. (FilmAffinity)
En un momento donde el cine está hasta arriba de secuelas, precuelas, spin-offs, reboots y otras variables que hacen del séptimo arte algo cada vez más predecible, hay que reivindicar el valor del original. ‘Aterriza como puedas’ fue la primera en hacer del humor absurdo una película, de convertir una constante ristra de gags, chistes, sketches y bromas absurdas un guion donde cabe todo.
La cinta, de 1980, y apenas 88 minutos de duración, es una clase magistral de cómo hacer comedia sin caer en el ridículo pero sin tomarte en serio nada, ni a ti mismo. En esta película tiene cabida todo tipo de chiste, y si este es más absurdo que el anterior mejor.
Se trata de una película que parodia las películas de aviones, de catástrofes, las comedias románticas… En un continuo gag que se va encadenando con el siguiente, los tres directores (Jim Abrahams, David Zucker y Jerry Zucker) nos adentran en un mundo donde todo tiene cabida. Absolutamente todo es parodiable y puede ser motivo de broma. Quien no esté dispuesto a reírse de todo, aunque sean temas espinosos, que se abstenga de ver la película.
‘Aterriza como puedas’ sería hoy imposible, ya que toca a modo de chiste temas como el maltrato a las mujeres (con esa mujer que se pone nerviosa por las turbulencias en el avión), el abuso a menores (con las insinuaciones del capitán del avión al niño) o el tratamiento de chiste que reciben temas médicos como el trasplante de corazón. En esta sociedad donde todo debe ser políticamente correcto, esta película reivindica otro tipo de sociedad, una en la que nos tomemos menos en serio y nos riamos de todo.
Otra gran virtud de esta obra maestra de la comedia es que no ha envejecido mal. Es cierto que aparecen cabinas de teléfono, que en los aviones se podía fumar o que no había ordenadores, pero todo lo demás se puede seguir aplicando a la actualidad, y ahí reside su gran acierto. Una película que casi 40 años después pueda seguir viéndose como el primer día y siga produciendo las mismas carcajadas que el primer día no puede sino calificarse de auténtica obra maestra.
El único punto negativo que le voy a poner, razón por la que no le doy un 10, es que el personaje de Leslie Nielsen, está poco aprovechado, debería contar con muchos más minutos. A pesar de esto, fue la catapulta definitiva para un actor que hizo carrera con comedias de este tipo, aunque ninguna le llegara a la suela de los zapatos.
Como apunte curioso, la película, originalmente titulada ‘¡Avión!’, se tituló en España como ‘Aterriza como puedas’. Esto dio pie a que futuras secuelas y películas similares, aunque no relacionadas con esta, llevaran la coletilla de “como puedas”.
Lo mejor: tiene la enorme virtud de reírse de sí misma, no se toma en serio.
Lo peor: a los amantes de lo políticamente correcto les saldrán sarpullidos.