-Paciente (P): Buenos días, Belén. Después de la última vez que estuve contigo me siento bastante mejor. Cuando voy al colegio a recoger a mi hija me suelo quedar un rato en el parque para que juegue y, entonces, directamente me voy a un banco a leer.
-Terapeuta (T): ¿Cómo te sientes haciéndolo?
-P: Pues liberada, la verdad. Al principio, seguía pendiente de lo que pensarían de mí por no acercarme al grupo de madres, pero luego me he quitado un peso de encima. Me he dado cuenta de que me sentía obligada a caer bien cuando, en el fondo, no tenía ganas ni interés en estar en un grupo que no me aportaba nada.
-T: Es importante que te hayas dado cuenta que era más tu deseo de agradar a los demás que el que apeteciera realmente acercarte a ese grupo.
-P: Es verdad. Fíjate que me han llegado comentarios por una amiga que ha oído que me criticaban por sentarme sola en el parque a leer. Eso me confirma la impresión que tenía del grupo, y que no me merece la pena estar de conversación con gente que critica a los que no son como ellos.
-T: Me acuerdo que te preocupaba ser una persona asociable. ¿Cómo te ves ahora?
-P: Me gusta conocer gente nueva, pero reconozco que no soy tanto de grupos. Prefiero quedar con alguien a solas a tomar un café que estar con ocho personas cenando en un restaurante. Pero ahora valoro más como soy porque también me he dado cuenta de que muchas de esas personas que están en grupo no tienen conversación cuando te quedas a solas con ellas.
-T: Me alegro que valores tu forma de ser sin tener la pretensión de tener que ser como los demás para agradarles.
-P: Sí. La verdad es que en ese aspecto me has ayudado mucho tú, Belén. He hecho más caso a lo que sentía que a los pensamientos y exigencias que me pasaban por la cabeza. He aprendido que si me siento más a gusto a mi aire que rodeada de gente, ¿por qué me tengo que forzar a otra cosa? Eso ha sido muy importante para mí: el no forzarme a nada.
-T: Es muy positivo el cambio que has dado. No todo el mundo tiene que ser sociable de la misma forma y tú has encontrado la tuya propia que te satisface. Vas por buen camino. Animo y hasta cuando quieras.
*Este consultorio es una recreación ficticia que no responde a ningún paciente concreto.
Podéis encontrar la 1ª parte en el siguiente enlace:
http://www.lapsicologaencasa.com/2012/07/no-se-de-que-hablar-cuando-me-acerco-un_22.html
Caminamos…Belén Casado Mendiluce