El hombre había acudido a un retiro de espiritualidad para intentar aclararse
con su vida. Como existía la posibilidad de tener un encuentro personal con el
Maestro, decidió concertar una cita para hablar con él.
Salieron juntos a pasear por la explanada cercana al monasterio y el hombre se
sinceró directamente con su Maestro.
-“Maestro, me siento perdido. No tengo grandes problemas en mi vida pero no
encuentro sentido a mi existencia. ¿Qué puedo hacer?”
El Maestro se quedó en silencio escuchándole y siguió andando por el camino.
A lo alto, en el cielo, una bandada de estorninos iniciaba su migración hacia las
tierras cálidas del sur. El maestro se quedó contemplándolos.
-“¿Ves esos pájaros como van volando hacia las zonas cálidas? Si no sabes
adónde vas te da igual ir por un camino que por otro. Busca como los pájaros
hacia dónde quieres ir, a qué das importancia y la vida te irá mostrando el
camino.”
El hombre escuchó en silencio las palabras de su Maestro, guardándolas en su
corazón. “Busca hacia dónde quieres ir…”eran palabras que resonaban en su
interior despertando en él inquietudes que creía dormidas.
Entonces se dio cuenta de que había vivido sin más pretensión que pasar los
días, sin más inquietud que hacer lo de cada día sin sentirse motivado en lo
que hacía. Ahora entendía que necesitaba sentir hacia dónde quería ir para
encontrar la motivación y el sentido de su vida.
Autora : Belén Casado Mendiluce
Caminamos…Belén Casado Mendiluce
belencasadomendiluce@gmail.com