Citando a Ferran Ramon Cortés, existen palabras que acercan a las personas y facilitan las relaciones. Son sencillas y de puro sentido común
-Palabra de agradecimiento: “Gracias”
-Palabra de disculpa: “Lo siento”
-Palabra de perdón: “No pasa nada”
Juntas forman la tríada fantástica que tendría que estar presente en cualquier relación interpersonal.
¿Las usas?
¿Eres de los que dicen que no piden disculpas por nada?
¿Eres de los que guardan resentimiento por todo?
¿Eres de los que piensan que el agradecimiento se supone sin necesidad de decirlo?
Entonces necesitas poner en práctica las palabras mágicas.
Pero para ello necesitas dos cualidades:
Ser humilde
Ser sencillo
Ser humilde para reconocer que te has equivocado, que puedes ser agradecido sin deber nada a nadie y que puedes perdonar sin llevar cuentas del mal, si la otra persona te pide disculpas sinceramente y con voluntad de cambio.
Ser sencillo para no enredarte con las palabras queriendo justificar tu actitud. Ser sencillo para no quedar por encima de la otra persona.
Prueba a usar las palabras mágicas con humildad y sencillez.Te acercarán a las personas y crearán una relación libre de tiranteces.
¿Te atreves?
Caminamos…Belén Casado Mendiluce
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