Dejar de juzgar sobre la vida de los demás significa que tienes una opinión sobre lo que hacen pero no un juicio condenatorio sobre las personas.
Opino sobre esa madre que tiene relación conflictiva con su hijo, pero no le condeno a esa persona como una madre desnaturalizada que maltrata a su hijo.
Opino sobre una relación conflictiva de hermanos pero no enjuicio tomando partido sobre la bondad de un hermano frente a la maldad de otro.
Es normal que opinemos sobre los comportamientos humanos pero los juicios condenatorios sólo sirven para enquistar y no para construir.
Si alguien te pide tu opinión sobre un tema conflictivo intenta no encender los ánimos, rebajar la tensión aunque tu opinión sea clara en algunos puntos.
Es tu actitud la que importa
La actitud de conciliar posturas o la de echar más leña al fuego.
Hay personas que están acostumbradas a pensar mal de los demás y a vivir en el enfrentamiento en las relaciones, incluso inconscientemente.
Ofréceles a esas personas otra actitud para relacionarse .con otros.
La actitud del que escucha,
Sin querer estar equidistante, sin implicarse en el tema sino dando tu opinión
Para que el otro repose las cosas.
No les dé excesivas vueltas en la cabeza y deje la puerta abierta a que las personas se encuentren más que se distancien.
Ofréceles otra actitud ante la vida
La escucha con implicación personal
El reposo en silencio
La actitud conciliadora
Eso es construir el mundo
Caminamos…Belén Casado Mendiluce
belencasadomendiluce@gmail.com
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