Esta semana Martín R. Ojeda (*), nuestro etólogo canino, nos habla de las diferentes etapas vitales en el perro y nos explicar a importancia de cada una de ellas.
“En varias de las consultas que los amables lectores de este blog han tenido la confianza de enviarme hemos hablado del período de socialización del perro que, demasiado frecuentemente, se ve interrumpido para su venta temprana. Para ver correctamente cuál es su importancia, veamos paso a paso cuáles son los diferentes períodos vitales del perro.
Pero, previamente, corresponde señalar un concepto de carácter más general que hay que tener presente. Las acciones de los animales están orientadas a lograr que el máximo número de sus genes pase a la generación siguiente (por eso la selección natural se ocupa normalmente de que sean los mejores para perpetuar la especie). Por ello, la madre será quien se encargue de criar a los cachorros y de enseñarles a obtener los recursos necesarios para su subsistencia. Pero claro, eso funciona muy bien en términos de selección natural y “libertad”, pero los perros están sumergidos en un mundo donde la selección artificial es la que prima y en el que tienen que convivir con los seres humanos, lo que hace que sea sumamente importante la intervención del criador responsable a la hora de introducirlos en sus primeros contactos inter específicos.
Veamos entonces, en detalle, cuáles son esas etapas por las que pasa la vida temprana de nuestros amigos.
1- Período neonatal
Es el lapso que va desde el nacimiento del cachorro hasta la segunda semana de vida y se caracteriza por la gran cantidad de tiempo que el cachorrillo utiliza en alimentarse y dormir (sueño de tipo REM). La madre se encarga de la estimulación ano-genital para crear la actividad refleja de micción y defecación.
En este período es sumamente beneficiosa la realización de manipulaciones neonatales cuyo objetivo será, como apuntábamos en párrafos anteriores, completar esos cuidados-formación que la madre imparte a fin de mejorar tanto el desarrollo intelectual de los pequeños como su capacidad gregaria para con el ser humano.
2- Período de transición
Se trata de la tercera semana de vida del cachorro. El sueño ya intercala fases REM con onda lenta, y la estimulación ano-genital comienza a no ser necesaria para que se desarrollen las conductas de micción y defecación.
Además, comienzan las conductas de tipo lúdico a la vez que el cachorro comienza a ser consciente de su entorno.
Los demás períodos, en la próxima entrega.
Aprovecho estas líneas para agradeceros una vez más el apoyo que habéis brindado durante este año a estos simples pero, eso sí, bien intencionados articulillos y para desearos a todos un próspero año 2013 en compañía de nuestros peludillos -de la especie que sean- que tanto mejoran nuestras vidas. ¡Urte berri on!”
(*) Martín R. Ojeda es etólogo y adiestrador de Servicios Caninos Integrales
(**) Si quieres que Martín te ayude con tu perro, recuerda rellenar este cuestionario y enviarlo a unomasenlafamiliablog@gmail.com.