Con el post de hoy iniciamos la colaboración con la Asociación Noble y Fiel Amigo (ANFA). Para los que no conozcáis la ANFA, deciros que se trata de una organización sin ánimo de lucro que pretende divulgar contenidos etológicos, informar acerca de la cultura canina, y, sobre todo, incidir en la tenencia responsable de los perros. Esta organización nos irá informando de temas interesantes sobre nuestros mejores amigos. El primer tema que nos aportan es algo que suele ocurrir con frecuencia, especialmente en fechas señaladas como estas que están terminando. Se trata de los peligros que conlleva para nuestro perro el querer hacerle partícipe de las celebraciones navideñas.
Actualmente, la mayoría de nosotros tenemos al perro como si fuese un miembro más de la familia, llegando en ciertas ocasiones a “humanizarlo” aún sabiendo que con algunas de esas buenas intenciones podemos llegar incluso a perjudicarle más que a ayudarle o beneficiarle. Un ejemplo de una de estas actuaciones son las comidas de Navidad. Es Navidad y como lo celebramos en familia queremos que el perro también lo celebre y que participe en nuestras comidas tomando los mismos alimentos que nosotros. ¡Es uno más en nuestra familia y no vamos a privarle de eso! De lo que parece que no somos conscientes es de que, lejos de hacerle un bien, ponemos en grave riesgo su salud. Nuestro sistema digestivo no es igual al de nuestro perro y evidentemente no toleramos de la misma manera los alimentos.
Habitualmente cocinamos con aceite, sal y/o azúcares, elementos que no están en la dieta de nuestros perros. Además, las grasas, las sales y los azúcares en las comidas de estas fiestas se multiplican de una manera importante. Teniendo en cuenta esto, ahí va un ejemplo de lo que puede pasar si le damos estos días a nuestro perro las sobras de nuestra comida: el páncreas de nuestro compañero no es capaz de hacer frente a la ingesta de alimentos como el chorizo, la panceta, etc. así que dándole estas comidas podemos provocar desde una leve indigestión hasta una pancreatitis…
Otra anotación importante: que el chocolate es malo para los perros no es una leyenda urbana, es muy cierto. La teobromina es una sustancia presente en el chocolate y que el organismo del perro no puede procesar y resulta tóxica para él. Así que si le damos de postre turrón de chocolate, lo rematamos.
Está bien querer que él también coma algo especial, pero con que añadamos a su comida habitual algo de comida húmeda para perros o una dosis extra de sus “chuches”, él estará igual de contento y nosotros más al no verle enfermar.
Ten en cuenta que hoy en día la mejor manera de asegurar una buena nutrición en nuestro perro es darle un pienso especialmente diseñado para ello. Esto lleva a que todos los días coma exactamente lo mismo y crea una habituación en su sistema digestivo. Todos los que tenemos perro sabemos que el mero hecho de cambiarle la marca de ese pienso sin hacerlo poco a poco puede provocar alteraciones digestivas hasta que se acostumbre a ella, imagina lo que puede provocarle alimentarle a base de langostinos, cordero y turrón de chocolate…
Por último, recuerda que él no entiende que hoy es tal día y puede esperar a que le caiga comida de la mesa, pero a partir de mañana ya no. Si no quieres tenerlo pidiéndote comida de la mesa el resto de los días, no le des tampoco nada ese día.
La comida es con lo que más podemos tener tentaciones de “pecar” con nuestros perros estos días, pero hay otras cosas de estas fiestas que alteran la rutina de nuestro amigo: los adornos (para él eso redondito que abunda en el árbol son más pelotas con las que jugar), la gente entrando y saliendo de nuestra casa (no dejes al niño a solas con el perro, por muy buenos que sean ambos), etc. Ciertos cambios en sus rutinas estos días son inevitables, pero intenta minimizarlos dentro de lo posible, tu perro te lo agradecerá: respeta su tiempo de descanso (trata de que tenga siempre su lugar de descanso al que acceder cuando quieraestar tranquilo y que toda la gente que haya en la casa lo respete), intenta no dejar los adornos a su alcance, etc.
Sigue estos consejos para que estas fiestas sean también felices para tu mejor amigo.