Hay al menos un ciudadano donostiarra que comprende al  arzobispo Cañizares cuando dice que el aborto es peor que el abuso a menores. Es el candidato del PP al Parlamento europeo, el donostiarra Jaime Mayor Oreja. Se lo recordó ayer su contrincante, el cabeza de lista del PSOE, Juan Fernández Aguilar, en un cara a cara televisivo que no despertó expectación, dicen las crónicas.

El análisis del tándem Cañizares-Oreja demuestra que el asunto de los abusos sexuales a menores no ha estallado aún en la sociedad como lo está haciendo el de los malos tratos a las mujeres. Todo llegará. Y entonces será difícil que un cargo público se atreva con una declaración semejante.

Entre tanto se me ocurre un plan veraniego para ambos. Unas vacaciones solidarias en la localidad inglesa de Coventry para ayudar a Mick Waters, uno de los niños que sufrió abusos en un colegio católico de Irlanda. Apoyarían la tarea de concienciación que este hombre lleva años realizando.

A la vuelta, seguro que su discurso habría cambiado.