En todos los libros de género que leo (género de autoayuda) hay capítulos dedicados a la intuición. Debo reconocer que no he sido una devota practicante de una disciplina que ha escapado de momento al método científico. Pero he comprobado que es una sabia compañera en momentos de inspiración. Ocurrió el sábado en la Fnac. Vagaba por la sección de Psicología sin mucho convencimiento y con muy pocas sorpresas, cuando me fui acercando a la abandonada sección de Literatura. Observaba que ninguno de los títulos era capaz de motivar el resorte de mi brazo y me dejaba llevar por una extraña resignación y una infrecuente ausencia de expectativas.
Debe ser así cómo pasan las grandes cosas. Porque algo importante ocurrió. De repente ví que mi brazo se alargaba decididamente hacia un libro en edición de bolsillo y que lucía en su portada el emblema de ‘best seller’: lo del género debe de ser lo mío. Se titulaba ‘Desde el cielo’. La autora era Alice Sebold. La película llegará en los próximos días a los cines.
La historia es radicalmente personal y según ha relatado la autora, le costó años de errores e intentos. La chica lo tituló ‘The lovely bones’, algo que debe resultar intraducible en castellano. Aquí le han puesto ‘Desde mi cielo’. No parece el mejor de los títulos. Pero qué estilo de grande tiene.