Ay, chica, que Monsanto nos respete las alcachofas. Llevaba unos días con la dieta de las alcachofas. Y no por razones depurativas. Sino por comer sola muchos días en casa. Harta del mismo menú y para aprovechar estas flores de la tierra sobrantes, ideé prepararlas según la receta de la tía Alicia en Navidad.

-Escurra bien las alcachofas.
-Retire toda parte de la hoja que pueda resultar un poco dura.
-Páselas por harina y huevo.
-Y a la sartén, con poco aceite y bien caliente. Quedarán ligeras.

Es una pena que mis vástagos no aprecien aún el giro que está dando su madre hacia la alta cocina. Pero lo bueno lleva tiempo.

Ahora, con la alegría por el trabajo bien hecho, vuelvo a mi lectura. ‘El mundo según Monsanto. De la dioxina a los organismos genéticamente modificados. Una multinacional que les desea lo mejor’, por Marie-Monique Robin.

A lo dicho. Que Monsanto nos respete las alcachofas. Ah. Y  puestos a pedir, que se salven también los espárragos…