Fue en una tertulia de espera de paraeducativa. Lo dijo una abuela.
-No siempre tienes caldo.
La señora relataba que le gustaba el programa de un cocinero recién llegado al universo televisivo.
-Cocina muy bien. Y es la cocina que se hace en las casas.
-Desde luego -apuntilló otro contertulio-. Se atreve a echar Starlux.
A mí, que había retirado las cajas de doble caldo de carne de casa y rechazaba los cantos de sirena de los defensores de la pastilla -‘te saca de más de un apuro’- me dió por pensar en las faenas de aliño. Una expresión procedente de la tauromaquia (ha nutrido el castellano) que informa de esas ocasiones en que uno sale airoso de una situación con pocas expectativas.
No sé si repensar mi decisión.