El taxista se adentraba en el núcleo profundo de ‘Oiartzun
valley’. Había que buscar el museo de geología Luberri. Y ahí apareció, en
pleno polígono industrial, un lugar en el que se habla de cometas, asteroides y
polvo de estrellas. Al menos estos días. El museo acoge la exposición temporal
‘Meteoritos, visitantes extraterrestres en nuestro planeta’. Y ahí, la geóloga
Ane Sedano se remontó 65 millones de años atrás cuando el meteorito más famoso
de la historia acabó con la vida de los dinosaurios. El planeta se volvió loco:
volcanes, terremotos, maremotos (hoy tsunamis), se cortó la cadena alimenticia
y la vida hasta entonces conocida desapareció. Unos pequeños roedores nos
trajeron hasta aquí: al desaparecer sus depredadores, los dinosaurios, se
fueron expandiendo y la evolución hizo lo demás. Pregunten mejor a un experto.

De alguna manera eso se cuenta en el museo Luberri (Pagoalde 41, 42 del barrio
de Ergoien). Y se muestra un trozo del meteorito de Reliegos, una masa
incandescente de 17 kilos que impactó en una calle del pueblo leonés en 1947.
Fue el día de los inocentes. No somos nada.