… perdón, del alarde público, que ha cambiado de nombre. Me preparo para la crónica que escribiré en DV, que una, de ser especialista en fiestas, lo es en tamborradas. Así que leo sobre los cargos de la marcha en la que las mujeres pueden ser soldados. La marcha tiene su general. ¿General? Sí, sí, es una chica, que las mujeres hace tiempo que entraron en los ejércitos (mejor de paz). Entonces, confundida, me voy a la RAE. ‘¿No tendría que ser ‘generala’?, me pregunto. Pero los señores (por enorme mayoría) de la Academia de la Lengua, dicen que ‘generala’ es la mujer del ‘general’ (en lenguaje coloquial, menos mal). Para mí que el desfile debería de invitar a algunos de sus miembros (¡uf!).

En fin, vaya lío que tengo. Tal vez sea mejor dejar las cosas como están. Es lo que no hicieron algunas mujeres de Irún hace más de una década (en la foto) y terminaron  con un alarde alternativo. Y ahora vengo yo con estas menudencias…