El pasado viernes Rafael Berrio y Mursego, dos de los artistas más completos y serios (en el mejor sentido) de la música guipuzcoana, presentaron su primer trabajo conjunto, Phantasma. Un espectáculo, llamémoslo así, bajo dos lamparas. Dos luces para iluminar, en un pequeño espacio pero intensamente, la oscuridad. Detrás suyo, en proyección, sus sombras o fantasmas, sus otroyos socarrones.
Dado que El Humilde Fotero del Pánico ya ha hecho una crónica inmejorable en su blog con el título de La amenaza Phantasma, y que ahí se puede saber todo lo que hay que saber sobre el concierto del pasado viernes en un lugar tan insólito y adecuado como el Seminario de San Sebastián, crónica que suscribimos desde aquí palabra por palabra, nos limitaremos a aportar unos vídeos-testimonio de cómo fue la velada. No son en concreto los mejores momentos, ni muestran toda su fuerza fuera del conjunto, y conviene verlos a pantalla y dedicación completa. Pero ahí están esos fragmentos de Phantasma, como aproximación o estimulante. O consuelo, hasta que llegue la siguiente representación/actuación/concierto/exposición de Phantasma.
Podemos aportar también alguna noticia de Rafael Berrio. En estos días está grabando su nuevo disco en Madrid, la esperada continuación del glorioso 1971. De nuevo con Joserra Senperena como guia total. Ya están grabados los pianos, algunas voces… y hoy viernes Rafael Berrio actuará en Madrid, en el Rincón del Arte Nuevo.