La capacidad que tienen los británicos para escarbar en todos los sucesos históricos de su pasado y realizar ficciones basadas en esos hechos reales, es verdaderamente encomiable, con grandes ejemplos como ‘Espías de Cambridge’ que va a ocupar nuestro rincón del recuerdo del viernes.
La historia se basa en uno de los escándalos más importantes del espionaje mundial, cuando descubrieron que varias personas con importantes cargos en el gobierno británico, llevaban más de veinte años infiltrados como espías rusos, revelando todos sus secretos de estado a la KGB soviética.
Al pertenecer todos a la más refinada aristocracia inglesa y ser reclutados mientras estudiaban en la Universidad de Cambridge, la prensa los bautizó como ‘The Cambridge Five ‘ y sus andanzas han inspirado libros, documentales y hasta esta gran miniserie, centradas en las historias personales de cuatro de ellos.
Ficha: Espías de Cambridge ( Cambridge Spies) 4 episodios 60 m . May 2003 BBC2 ( UK)/Album-DVD (E)
Sinopsis:
Guy Burgess, Kim Philby, Donald McLean y Anthony Blunt, son cuatro grandes amigos y estudiantes de la universidad de Cambridge, con grandes simpatías por la revolución bolchevique en plenos años treinta. En el campus son contactados por unos oficiales de inteligencia para realizar ciertas labores en sus entornos familiares y de amistad.
Pronto descubren que esas personas son agentes rusos, por lo que aceptan trabajar como espías, infiltrándose los cuatro en posiciones claves de la BBC ( Burgess) , el contraespionaje (Philby), la diplomacia ( McLean) e incluso la casa real (Blunt) donde informaban de todo a sus contactos de la KGB.
La historia desarrolla el periodo entre su captación como espías en 1934 hasta la deserción de dos de años en 1951 huyendo a Rusia por miedo a ser descubiertos.
El inicio: Peter Moffat es un hijo de militar que vivió en numerosos países del Imperio Británico, antes de empezar una prometedora carrera como abogado de tribunales, que compaginaba con la pasión por la escritura con diversas obras para la radio de la BBC.
Su primer guion fue para un drama legal ‘Kavanagh QC’ lo que le valió un encargo de la BBC para recrear la historia de los espías de Cambridge que convulsionó los cimientos de la confianza británica en los años cincuenta.
Tras documentarse de forma exhaustiva, Peter Moffat, estrenó la miniserie que tuvo un gran éxito y que le abrió las puertas de la creación de sus propias series, casi todas ellas ambientadas en el mundo legal, donde destacan sobre todas las fabulosas ‘Criminal Justice’ (adaptada por la HBO como ‘The Night of’) y ‘Silk’ la mejor serie de abogados de la historia de la televisión británica con una excelsa Maxine Peake como protagonista.
La trama: ‘Espías de Cambridge’ describe de una forma minuciosa todo el recorrido de esas cuatro personas desde el momento que son unos despreocupados estudiantes de la élite británica de Cambridge hasta su desenmascaramiento y huida.
Las cuatro partes de la miniserie, empiezan en su primer episodio, con su captación y sus primeras misiones como espías, en el segundo en su ascenso profesional dentro de las agencias o lugares gubernamentales donde trabajan y tienen su tapadera.
La tercera entrega se centra en el apogeo de su trabajo durante la II Guerra Mundial, donde por las circunstancias geopolíticas acaban espiando de forma indirecta para los aliados, para finalizar en la entrega final con la desarticulación de la red de espías y las consecuencias políticas que tuvo.
Es muy importante comprender el proceso por el cual, esas personas que tienen todo en la vida, deciden pasarse al lado del espionaje, que según dejan entrever por lo menos en sus inicios, es parte por convicciones políticas, pero también por el placer del riesgo a ser descubiertos y vivir al filo de la navaja, como se puede comprobar en el trailer de la serie.
Sus misiones les llevan por toda Europa, durante la década de los años treinta y cuarenta, incluyendo la presencia de uno de ellos en nuestra Guerra Civil y más concrétamente en el bombardeo de Gernika, bastante patillero debo añadir.
La historia es apasionante y los cuatro actores cumplen a la perfección en los inicios de unas carreras que en todos los casos siguen siendo excelente, como seguramente habrán reconocido al ver sus caras en las fotos que acompañan el artículo.
No pude verla en su momento, pero la descubrí hace poco en una venta de rebajas de DVD’s donde al ver el nombre de mi admirado Peter Moffat en el guion, la compré de forma inmediata y ha sido una de las adquisiciones de las que estoy más orgulloso, aunque he podido comprobar que se encuentra completa en Youtube, dependiendo de su nivel de inglés.
Los actores:
Tom Hollander ( izq) es uno de los mejores actores británicos de la actualidad, pero su primer papel importante fue el de Guy Burgess, un periodista que llegó a un alto cargo de la BBC primero y luego al Ministerio de Exteriores. Su personaje esconde su condición de espía a la vez que la de homosexual, lo que le hacía un personaje bastante torturado, que necesita esa adrenalina como motor de vida, junto a abundantes ingestas de alcohol y todo tipo de drogas.
Hollander ha aparecido en innumerables series y películas desde la popular saga de ‘Piratas del Caribe’ hasta series como ‘The Night Manager’ o la sitcom ‘Rev’.
Samuel West ( der) es el menos conocido a nivel popular del reparto principal, por haber realizado casi todo su trabajo en la escena teatral, siguiendo los pasos de sus padres los actores Timothy West y Prunella Scales.
Su papel más importante ha sido el de Anthony Blunt, el infiltrado en la casa real, donde llegó a ser una de las personas de máxima confianza de la reina Isabel, con el descalabro que supuso para la monarquía, dicha revelación.
Toby Stephens ( izq) es otro rostro muy popular, que se dio a conocer como Kim Philby, uno de los jefes del contraespionaje británico, con lo que se pueden suponer su efectividad laboral cuando en principio se debería investigar a si mismo y de hecho era el jefe del grupo.
Stephens llegó a esta serie tras aparecer como un villano Bond en ‘Die Another Day’ y posteriormente ha tenido una buena carrera protagonizando series populares como ‘Black Sails’, prestigiosas como ‘Summer of Rockets’ o fallidas como ‘Perdidos en el Espacio’ .
Por último tenemos a Rupert Henry-Jones ( der) que interpreta a Donald McLean, el hijo de un antiguo líder de la oposición en el Cámara de los Comunes, que hizo una gran carrera diplomática con puestos importantes en la embajada de Washington, donde tenía acceso a muchos documentos confidenciales de sus aliados estadounidenses.
Henry-Jones es muy popular en el Reino Unido, por haber protagonizado durante muchos años la longeva serie de espías ‘Spooks’ junto a otro importante papel en ‘Silk, más recientemente lo hemos visto haciendo de protoinfectado en ‘The Strain’ .
Epilogo:
‘Espías de Cambridge’ es una de esas magníficas miniseries a las que nos tienen acostumbrados la BBC, con un gran guion y unos buenos actores, por lo que es altamente recomendable si les interesan las historias de espías basadas en hechos reales.
Esperamos sus opiniones y comentarios, aquí o en nuestra cuenta de twitter (@lmejino). Hasta la próxima
Lorenzo Mejino