En las primeras décadas de producción televisiva, la visión generalizada del público, era de ver a la pequeña pantalla como una segunda división del audiovisual, muy por debajo del cine que era el que acaparaba los mejores talentos y actores de Hollywood.

De esta manera muchos veían a la televisión como un vehículo de promoción y descubrimiento de nuevos talentos antes de su paso al celuloide, o realizando el camino inverso, un lugar donde seguir la carrera artística cuando los buenos papeles empiezan a escasear a causa de la edad.

Rock Hudson fue uno de los galanes por antonomasia de Hollywood en los años cincuenta y sesenta, alcanzando grandes cimas de popularidad en especial por su serie de comedias románticas que protagonizaba con Doris Day, la que muchos llamaban la novia de América.

Cuando empezó a intuir su ocaso cinematográfico tuvo la habilidad de pasarse a la televisión con la serie que les vamos a presentar, un procedimental ligero y simpático, que le permitió mantenerse en la cresta de la popularidad en todo el mundo durante unos cuantos años mas, como un comisario cuarentón moderno y enrollado que resolvía todo tipo de misterios junto a su mujer, una veinteañera inteligente y pizpireta, en esta serie que les vamos a recordar “McMillan y esposa”, como fue conocida en nuestro país.

Ficha: McMillan y esposa ( McMillan & Wife) 40 episodios .   Sep 1971- Abr 1977 NBC (USA) TVE (E)

Sinopsis: Stuart McMillan es el jefe de policía de la ciudad de San Francisco, que debido a la necesidad de socializar de su cargo, se ve inmerso en la vida de la alta sociedad de la ciudad del Golden Gate Bridge, asistiendo con su mujer a todo tipo de actos benéficos. Por ello cuando se produce algún robo o asesinato en esas altas esferas, requiere la colaboración de su mujer por su mayor conocimiento de los involucrados, ya sean las victimas o los sospechosos, formando un tándem atípico en la lucha contra el crimen.

El inicio: A mediados de los años sesenta, la cadena NBC llegó a un acuerdo con los estudios Universal, para producir una serie de dramas antológicos e independientes para ser emitidos en forma de serie en los EUA y de películas en los mercados exteriores, con una duración entre 90 y 120.

El éxito de la primera serie creada en este formato, llamada “Audacia es el juego”, les animó a seguir por ese camino y a principios de los setenta decidieron creador un contenedor de series de misterio llamado “NBC Mystery movie”, con tres series que irían rotando en ese espacio a un ritmo de un capitulo mensual.

Los estudios Universal se pusieron manos a la obra y encargaron a un guionista muy reputado y experto como Leonard B. Stern, una serie para acompañar a”Columbo” y “McCloud” que ya habían sido aprobadas para ir en ese contenedor.

Stern curtido en todo tipo de series de éxito como “Superagente 86”, “The Honeymooners” o “The Steve Allen Show”, todas ellas muy importantes en los inicios del medio, decidió huir del protagonista único y exclusivo que dominaba en  sus compañeras de espacio, para crear un híbrido de serie de misterio con toque familiar, con un matrimonio atípico como investigadores principales.

La serie se estrenó con un enorme éxito como sus dos compañeras, y se convirtió en una de las favoritas del público en ese dream-team imbatible de series, que se apoderaron de la parrilla dominical de la NBC, durante varios años, exportando su éxito a todo el mundo, con esta cabecera tan característica y la música de un clásico como Jerry Fielding

La trama:
Los capítulos de McMillan y esposa seguían un esquema bastante fijo con un misterio central por resolver y donde la principal dificultad la tenían al principio para justificar con cualquier tipo de excusa la presencia de la mujer en las investigaciones del delito que el jefe de policía de San Francisco acabada trabajando, dejando de lado el resto de fuerzas del departamento.

Para ello, nada mejor que recrear delitos en fiestas, bailes o actos benéficos de la alta sociedad de San Francisco, donde la presencia de su mujer le da un apoyo logístico para interaccionar con los invitados, como pueden comprobar a continuación

El rasgo mas diferencial para aquella época, era la diferencia de edad entre ambos cónyuges, con un hombre bien entrado en los cuarenta, conservador y algo machista que ha encontrado el amor de su vida en una joven veinteañera, moderna y vestida a la última moda, viviendo ambos en una casa de ensueño con una criada gruñona y cascarrabias a su servicio.

La resistencia de su esposa a ser una mujer florero, sin trabajar ni niños a los que criar, y su capacidad de entrometerse y llegar a lugares poco habituales eran el complemento ideal para dar un poco de salsa a la gran historia de amor que vivían ambos, en forma de eterna luna de miel investigando delitos.

Por supuesto, que en el transcurso de las investigaciones, la mujer solía meterse en embolados que hacían peligrar su vida, pero de los que salía siempre de forma inmaculada, como pueden comprobar en este vídeo

La serie carecía del dramatismo o de la seriedad de Columbo o McCloud, acentuada por la comicidad que proporcionaban los dos personajes secundarios de la serie, en especial la deslenguada criada Mildred, que proclamaba sus verdades a los cuatro vientos, y no dudaba en enmendarles la plana a sus jefes si algo no era de su agrado. Cualquier aparición de Mildred era motivo de carcajada como este baile desmadrado que realiza con su jefe en una fiesta, fiel muestra del tono de su personaje

El otro personaje cómico era el sargento Enright , el torpe ayudante del comisario de policía, de gran corazón pero algo atolondrado y que servía principalmente para que su jefe pudiera comentar con alguien que no fuera su mujer, los aspectos policiales de los casos que investigaban.

El tono ligero, con el misterio quedando muchas veces en segundo termino, frente a las historias del matrimonio ha sido la razón principal por la que la fama de la serie se ha desvanecido mucho mas rápidamente que las de sus dos compañeras de viaje, a pesar de tener la misma repercusión en el momento de su emisión.

El hecho de ser la mas moderna en cuanto a estética setentera ha jugado en su contra porque esos peinados y esos trajes han envejecido mucho peor que la raída gabardina de Colombo o el sombrero Stetson de McCloud, mucho mas atemporales y si encima las tramas no eran nada especial, la sensación al revisarla no es precisamente positiva.

En cambio, mis recuerdos de juventud cuando la emitían por la cadena casi única del país en aquella época eran excelentes, porque era una serie entretenida y lujosa para la época, con la que me reía mucho con los secundarios y proporcionaba un misterio ligerito y fácil de entender para todos los miembros de la familia.

Me van a perdonar si les reconozco que a esta serie le tengo un cariño especial, por un tema personal con la protagonista, Susan Saint James, a la que conozco desde hace mas de veinte años, y con la que mantengo una relación muy cordial a través de mi contacto laboral con su marido.

Coincido con Susan con bastante frecuencia y siempre recordaré su enorme sorpresa al conocerla en los JJOO de Barcelona y comentarle la fama de su serie en nuestro país casi quince años antes, iniciando una amistad que dura hasta la fecha, acogiendo en algún viaje a sus hijos en Barcelona y visitando su casa de Los Ángeles, cuando voy por California, de hecho ya me ha comentado que le envíe el articulo como curiosidad a ver lo que escribo sobre ella.

El actor:
Rock Hudson, empezó su carrera cinematográfica con pequeños papeles hasta que en la década de los cincuenta, el gran Douglas Sirk le dio varios papeles protagonistas en melodramas como “Obsesión” o “Escrito en el viento”, de donde saltó a ser el galán romántico de Doris Day en innumerables películas.

Hudson nunca fue un gran actor y a pesar de su enorme popularidad, a nivel artístico nunca se le tomó muy en serio, por ello a nadie sorprendió que se refugiara en la televisión, para interpretar el papel de un comisario hecho a su medida, y en el que cumplía de forma solvente.

Su carrera posterior siguió en las rentables miniseries de la época como “Wheels”, para acabar en un papel recurrente en “Dinastía”, donde los signos del SIDA que había contraído se hacían cada vez mas visibles y que le llevaron a la muerte en 1985 con 59 años de edad. Su muerte, siendo la primera de una persona conocida y famosa por el SIDA, empezó a concienciar a la gente y en especial al colectivo artístico de la gravedad de esa nueva enfermedad, todavía muy desconocida en esa época, independientemente de la condición sexual de la persona afectada.

Susan Saint James, era una joven modelo que con apenas veinte años, consiguió protagonizar una película televisiva con Tony Franciosa “Audacia es el juego”, que posteriormente pasó a ser una serie televisiva de gran éxito, que le reportó incluso un Emmy a la mejor actriz secundaria. Su salto a la fama mundial vino dado por la popularidad que acabó de cimentar como la moderna mujer de Stuart McMillan.

Saint James, siempre fue una actriz muy natural, que iba mas allá de su indudable atractivo personal, protagonizando a mujeres fuertes e inteligentes, lo que no era habitual en esa época. Tras su despedida turbulenta de la serie, protagonizó  durante seis años, una comedia de relativo éxito “Kate & Allie” de dos divorciadas con hijas que deciden ir a vivir juntas.

Tras esta serie, decidió retirarse de la actuación y criar a los hijos que tuvo con su marido Dick Ebersol, el ejecutivo director de deportes de la cadena NBC, encargada de la transmisión de todos los JJOO en los EUA.

Nancy Walker tuvo una carrera muy solida como una secundaria muy solicitada, tanto en cine como en televisión, con papeles recurrentes en grandes éxitos como “La chica de la tele” o su secuela “Rhoda”, lo que le llevaron a su papel mas conocido, el de la criada Mildred, una especie de Florinda Chico o Rafaela Aparicio a la californiana.

Bebedora, fumadora, lenguaraz, el personaje de Mildred era políticamente incorrecto para la época y tenia las frases cortantes mas divertidas de la serie, con una Nancy Walker esplendida en todo momento. Abandonó la serie en su 5T, para protagonizar su propia serie “The Nancy Walker Show”, que fue un fracaso rápido y siguió apareciendo en todos los sitios donde le pedían hasta su muerte en 1992 a los 69 años.

Por último, John Schuck, es un actor que empezó su carrera bajo la tutela de Robert Altman, con pequeños papeles en “MASH” , “Brewster McCloud” y otras del gran director. Su salto a la popularidad lo dio cuando fue elegido para interpretar al  Sargento Enright, el ayudante del comisario, fuente de risas por sus meteduras de pata bastante continuas en el curso de las investigaciones, aunque siempre acababa enmendándolas de una manera u otra.

Schuck, al final de la serie, paso a protagonizar una de las series mas frikis de la historia, Holmes y Yo-yo, de la que les invito a que vean su cabecera para que puedan opinar sobre ella y su papel en la misma.

Su carrera se ha especializado en hacer monstruos de todo tipo, desde Fred Munster, en un remake de “Los Munster”, hasta Klingons diversos en Star Trek, u otros alienigenas en Babylon 5. Sigue trabajando con cierta regularidad en pequeños papeles en la actualidad.

El final:
La serie tuvo un enorme problema al final de la quinta temporada, cuando Susan Saint James, exigió renegociar su contrato para equiparar sus condiciones salariales a las de Rock Hudson, ya que a pesar de ser coprotagonista total de la serie, cobraba un salario diez veces inferior, sencillamente por ser mujer.

La cadena se negó en redondo a subirle el sueldo, a pesar de que su fama se había convertido en equiparable a la de Rock Hudson y decidieron acabar con su personaje, haciéndola perecer en un accidente aéreo al inicio de la 6T, en la que ya no aparece. En paralelo también desapareció de la serie, la criada Mildred pero en este caso para protagonizar su propia serie, de la que les he hablado anteriormente.

La reinvención de la serie con un comisario viudo y un nuevo ayudante y una nueva criada, fue un auténtico desastre al traicionar el espíritu de la serie y perder el encanto que Susan Saint James, daba a su personaje y convertirse en una serie de chica por semana, con una mujer nueva a cada episodio, para intentar suplir la ausencia irreemplazable de su mujer.

La serie fue cancelada de forma fulminante al final de los escasos seis capítulos de la 6T, por la caída en picado de sus audiencias, totalmente merecida por la avaricia y mezquindad de la cadena NBC.

Curiosidades:
La serie tuvo una gran popularidad en su estreno por la 1, convirtiendo a Susan Saint James, en un autentico mito sexual en la pacata España de la época, como pueden recordar en este vídeo

McMillan y esposa, es una serie que me ha hecho una ilusión especial recordar por las circunstancias personales que tengo con la misma, y que si no he querido hacer antes, ha sido para evitar una excesiva personalización del blog. El hecho de tener una próxima reunión con Susan Saint James y su marido, me ha decidido a animarme a recordarla a modo de mi homenaje personal hacia ellos y que anhelo que hayan disfrutando tanto como en mi caso escribiéndola.

Esperamos sus opiniones y comentarios, aquí o en nuestra cuenta de twitter (@lmejino). Hasta la próxima
Lorenzo Mejino