Andaba arreglándome el pelo cuando entró uno para sentarse al lado de otro que esperaba turno. Se medio conocían y después de los saludos educados empezó la conversación:– Y ¿en qué andas metido ahora?-– Pues me he subido al carro de la moda.--¿Una tienda de modas?-– No, hombre, he montado un bar de vinos o, mejor […]