Un aviso para quienes vivan en San Sebastián y cercanías y quieran un vino fantástico que está en un momento espléndido salgan a Super Amara (supermercados locales de la zona) a comprar este vino que está en oferta a menos de 12 euros y se lleven cuanto puedan porque es una oportunidad única.
Rewind: Finca Sandoval es la pequeña obsesión de Víctor de la Serna, maestro de maestros, especialista en muchas cosas y, a diferencia de otros que pretendemos serlo, él sí entiende de todo aquello en lo que se especializa. Entre sus especialidades le viene de familia la herencia de ser Fernando Point (y hace poco me entero que de familia le viene esa pasión por la hostelería a través de sus ancestros los Arenilla) gran crítico gastronómico y amante de los mejores vinos.
Me acuerdo aún cuando en foros del vino (año 97/98) empezó a explicar esa pequeña parcela en Manchuela que estaba preparando para hacer vino, las catas del suelo, la selección de las variedades y las locuras que pensaba hacer. Y las hizo y algunos torcieron el morro porque ya se hablaba de las maravillas de las primeras añadas y hubo quien decía que eso no podía ser que nos vendíamos al diablo para que no nos caneara (intelectualmente) Víctor. Y no, el tiempo nos ha dado la razón. En sucesivas catas, además, ha demostrado que se puede llegar a rozar la perfección con su TNS, un vino hecho con la touriga nacional portuguesa y que recuerdo con auténtica pasión porque siempre me pareció que tenía todo lo que yo le pedía a un vino, reflexión y entretenimiento. Pero se hace sólo en botellas magnums y son pocas para amigos y conocidos y a buen precio. Por cierto que en su cuenta de twitter (@victordelaserna) ya ha anunciado que no habrá TNS del 2012 porque no parece que haya salido del gusto de la casa.
En cualquier caso también hace Salia que se supone que es su entrada de gama, pues bienvenida la entrada de gama porque es aquí donde juega a hacer vino y a demostrar que cada año puede ser diferente. Este 2008 está hecho con syrah, garnacha tintorera (la variedad que deberíamos reivindicar más) y garnacha. La madera muy justa que ha conseguido dominar excesos que otro se empeñan en resaltar y un equilibrio que te hace pensar en Burdeos. El vino está en un momento brillante y desde que se toma la primera copa se va bebiendo una evolución hacia una elegancia que yo compararía con permiso de Víctor como un bluesman al estilo de Albert King a quien se escucha sentado, sintiendo cada nota.
Para quienes no tienen la oportunidad de tenerlo a mano Finca Sandoval recomienda su correo: fincasandoval@gmail.com. Más sencillo imposible.
@guiabuenamesa