Cenaba con un empresario, alto directivo de una empresa, supuestamente interesado por el mundo del vino que me dijo de una manera tajante: “Todas esas tonterías sobre los vinos viejos es una mentira. Los vinos cuando mejor están es a los cuatro o cinco años, todo lo demás es un snobismo y una mentira.” Y remató la jugada con un: “Y me lo han dicho alguno de los mejores enólogos. Todas esas tonterías se hacen para vender los vinos viejos.”

Claro que fue un shock para mi porque esa misma tarde 15 amantes del vino y la genial Mercedes López de Heredia habíamos probado un Tondonia del 54 que aún no se puede entender que estuviera tan vivo, tan natural, tan lleno de matices, tengo anotado lo que llaman aromas de tercera generación, como si entrara en una habitación solemne con muebles antiguos nobles, también guindas y uvas pasas y alguien preguntó “¿Y este vino, como estaba hace 40 años?” “Espectacular, joven, afrutado, diferente.”

Y en eso consiste fundamentalmente todo este mundo, que evoluciona, que es diferente y esa diferencia hay que saberla apreciar. Buscamos matices y los encontramos y si no hay nada lo tiramos por la fregadera porque no nos interesa ver lo que no hay ni disfrutar de lo que no existe.

Pero sigo pensando si no será realmente un snobismo y pienso de la misma manera de alguien que decide que todo lo que no se haya escrito en el siglo XX es una mierda y es aburrido, que todo aquel a quien le gustan los impresionistas es un snob porque la pintura de verdad empezó con Picasso y todo lo anterior es aburrido y no tiene sentido. Y me quedo más tranquilo porque ahora sé que quien no sabe apreciar las cosas creo que es porque no las conoce. Pero sinceramente, déjame a mi disfrutar de lo que tu no entiendas, tanto si es en la literatura, en la pintura, en el sexo o en el vino.

Yo sigo pensando que la única manera de disfrutar de algo es conociéndolo a fondo. Pero si a pesar de conocerlo no lo disfrutas, no le quites la diversión a otro. Cada uno disfruta de lo que le apetece y puede, que hay a quien le gusta Belén Esteban y yo le dejo en paz. Disfruto de Shakespeare (Shylock sigue siendo emocionante) aunque a ti te parezca aburrido.

Blog escrito escuchando: JJ