Mis amigos son el mayor tesoro que tengo, siempre respetando a mi familia.
Mis amigos son algo que he cuidado desde pequeña, o al menos lo he intentado. Tengo amigos de hace poco, y tengo amigos desde hace 40 años!!! Y a todos los adoro.
Con el tiempo, y la experiencia en el despacho, cada vez me he dado más cuenta del valor que cada uno tiene. En mi profesión he aprendido lo difícil que es tener buenos amigos, a pesar de que seas una maravillosa persona, hablo de mis clientes. Tengo clientes magníficos, a los que las circunstancias les han hecho estar buscando gente con la que relacionarse y no saber cómo hacerlo. Personas que tienen mucho que ofrecer, y sin embargo se encuentran solas y no saben con quien compartir sus vidas. Personas muy interesantes y muy generosas en sus sentimientos, pero que no saben con quien compartir sus experiencias. Todos ellos se ponen manos a la obra para no sentirse solos y buscar personas con las que compartir sus vidas, y puedo asegurar que esta parte del proceso, muchas veces resulta difícil. Por esto mismo, yo me siento muy afortunada, aunque sé que también depende de mi.
Cuando trato con personas más jóvenes, que aún tienen su cuadrilla de toda la vida y lo ven como algo normal, les animo a que cuiden a sus amigos, a que dediquen un tiempo a estar con ellos, aunque en un momento dado les pueda dar pereza. Cuando lo tienes no te das cuenta de lo importantes que son, hasta que dejan de serlo. Lo mismo me ocurre con mis hijos, hay momentos en los que tienes que elegir entre que hagan todas sus actividades, estudios, deporte, y que también cultiven sus amistades, y creo que como padres a esto le debemos conceder la misma importancia que al resto de los otros aspectos de su desarrollo. Es tan importante aprender a estudiar como aprender a relacionarse de una forma sana con sus amigos.
Por este motivo dedico este post a todos aquellos que me han brindado su amistad desde siempre, a quienes lo han hecho desde pequeña, las que llevan 40 años en mi cuadrilla o a quienes se han acercado a mi hace pocos años y han aguantado cada una de mis manías y me han acompañado en cada una de mis etapas. A todos ellos muchas gracias por estar ahí.