Esta semana estamos escuchando en todos los medios de comunicación lo deprimidos que podemos estar muchos por volver a la rutina tras las vacaciones. Imagino, que este año teniendo en cuenta la situación económica del país, lo tendrán en cuenta para no herir la susceptibilidad de todos los que no tienen trabajo al que volver, pero aún y todo, siempre me ha parecido, de bastante mal gusto este fenómeno de tener que repetirnos lo desanimados que nos tenemos que sentir por continuar con nuestras vidas.
Es verdad, que en vacaciones, se disfruta mucho, que uno se lo puede pasar muy bien y que normalmente se tienen menos obligaciones, lo que nos hace por unos días sentirnos más libres. Pero de ahí a que se empeñen en que no nos encontremos bien por vivir nuestra rutina me parece un despropósito. ¿Quién es nadie para pensar que la mayoría de nosotros somos desgraciados en nuestra vida y por esto necesitamos las vacaciones para sentirnos bien? Es verdad, que las vacaciones pueden servir, y sirven, para descansar, pero eso no significa que no podamos disfrutar con nuestro trabajo, horarios o actividades varias que hagamos durante el año. Por supuesto, para que te guste tu rutina, tiene que gustarte tu vida, y trabajar por ello, por esto, creo que si alguien se deprime de verdad por volver de vacaciones, lo primero que debería hacer es reflexionar sobre qué es lo que tanto le desagrada de su vida, y ponerse en acción para cambiarlo.
Buscar nuevas ilusiones cada año, nos puede ayudar a motivarnos en el regreso. Los retos nos hacen estar más animados y a sentirnos bien, pero no siempre es necesario tener que buscar nuevos retos, simplemente puede tratarse de mejorar ciertos aspectos de nuestra vida personal o laboral que ya hacíamos anteriormente, o mantener lo que tenemos, que muchas veces no es poco…
Sea como sea, no dejemos que nadie nos diga cómo nos tenemos que sentir, y mucho menos, si nos proponen estar de bajón por el mero hecho de ser septiembre. Aunque empiece a oscurecer antes y comiencen las clases, aún quedan muchas cosas para disfrutar y pasárnoslo bien, por lo tanto, disfrutemos de este mes, que por otro lado y para mi es uno de los más románticos del año.