Cada vez hay más personas que son solteras y son felices siéndolo.

Hace unos años, ser soltero/a, significaba estar solo/a, que nadie quería estar contigo, y que no te quedaba otro remedio que vivir tu vida con tu soledad. Sin embargo, hoy en día, ser soltero/a, sin pareja, es la decisión que uno toma y no por ello uno tiene que estar sin compañía ni sentirse sólo.

A pesar de esto, siento y veo, que muchas veces, estas personas tienen la necesidad de justificarse, de tener que demostrar que tienen lo que han elegido, y que se lo tienen que comunicar a los demás, a los de su alrededor. Y mi pregunta es: ¿Qué hace que una sociedad que se manifiesta libre en todos sus sentidos haga que estas personas aún tengan que dar explicaciones por no querer compartir sus vidas de forma tradicional con otra? ¿Es problema de ellos o de la sociedad que aún no ve normal que haya personas que decidan volar solas?

Puede parecer duro, pero creo que ellas mismas no están preparadas para ello, y sobre todo, que los demás, no estamos preparados para entenderlo.

Hace poco, me ha ocurrido en el despacho que una persona se diera cuenta lo que significaba poder vivir su vida sin necesidad de esa persona que creía necesitar, y ha descubierto todas las posibilidades que se le presentan ahora que sabe que puede ser feliz por ella misma, sin necesidad de nadie más. Y es entonces, cuando se da cuenta que sus decisiones sólo dependen de ella, y lo que es más importante, que sus decisiones sólo le afectan a ella. Esta persona ha decidido vivir su vida, sin nadie que se la condicione, es una decisión propia, y quiere asimilar sus consecuencias por ella misma, sin tener que darle a nadie explicaciones. Entonces, ¿Quiénes somos nosotros, la sociedad, para juzgarle?

Lo que es verdaderamente importante, es que ellos no se consideren juzgados ni teniendo que dar explicaciones. Y para eso, son ellos los que tienen que asumir su parte de responsabilidad en aquello que hayan elegido. Ser “single” en una opción y pueden disfrutar de ello.