Plantarse ante las Injusticias Laborales | El trampolín de tu vida >

Blogs

Ainhoa Cilveti

El trampolín de tu vida

Plantarse ante las Injusticias Laborales

Tener que decir no a un trabajo cuando se es autónomo requiere muchas veces una gran dosis de confianza y de superación de miedos, pero hoy en día, está claro que a veces es necesario, si queremos que se nos valore y que se valore lo que hacemos.

Hace unos días, un amigo me comentaba que había tenido que plantarse y renunciar a un trabajo que estaba haciendo por una tarifa muy por debajo de su valor. En un principio, se vio obligado a aceptar, porque necesitaba trabajar y porque se le prometió que se revisarían las condiciones monetarias más adelante, cuando demostrara que hacía bien el trabajo. Llegado el momento, y cuando quiso que se cumpliera con lo establecido, le dijeron que ya habían encontrado otra persona que estaba dispuesta a continuar con tu trabajo por el mismo precio, por lo que no tenían problema en que él no quisiera seguir. Por supuesto, mi amigo no sólo se sintió mal porque no le renovaban en las condiciones que se le habían prometido, sino que además se sintió engañado, ya que desde un principio tenían claro que no pensaban pagarle más y aprovecharon el tiempo y las circunstancias económicas para conseguir otra persona. Como suele ocurrir en estos casos, una vez que ha decidido plantarse y darse a valorar, las cosas han empezado a salirle mejor, obteniendo más contratos a mejor precio.

Las personas que trabajamos por cuenta propia y que necesitamos conseguir continuamente nuevos clientes, en ciertos momentos, podemos caer en la tentación de aceptar algunos trabajos mal pagados y con malas condiciones, por miedo a no llegar a fin de mes. Sin embargo, tenemos que aprender que esto sólo nos perjudica, ya que no vamos a lograr que nadie valore nuestro trabajo si no lo hacemos nosotros mismos. Es verdad, que hay ocasiones en las que el beneficio, no sólo viene a través del dinero, y que nos puede ofrecer oportunidades que nos resulten interesantes, aunque sea a medio o largo plazo, pero siempre teniendo en cuenta, que debemos ser nosotros los primeros en creer en lo que hacemos y en valorarlo, para así poder venderlo a su precio justo.

En este tema referente a las condiciones, también incluyo los horarios, ya que en muchas ocasiones se nos exige que seamos capaces de estar disponibles casi las 24 horas, cuando lo que estamos tarifando son unas pocas horas o un tiempo concreto. Respetemos nuestro trabajo para que nuestros clientes también lo hagan.

Temas

Coaching para todos

Sobre el autor


marzo 2015
MTWTFSS
      1
2345678
9101112131415
16171819202122
23242526272829
3031