>

Blogs

Ainhoa Cilveti

El trampolín de tu vida

Techo de cristal

Muchas veces hemos oído este término referente a la imposibilidad de ascender en un trabajo, sobre todo cuando se habla de los obstáculos con los que se encuentran muchas mujeres para conseguir promocionarse. Desde luego, es un término que no sólo atañe exclusivamente al género femenino, porque hay muchas situaciones, en las que sin ser visibles, impiden que cualquiera de sus trabajadores puedan llegar más alto dentro de la misma empresa, por formación, nacionalidad, o simpatías personales de quienes deciden, y aunque es verdad que es más habitual en el caso de las mujeres, no quiero discriminar en este post ninguno de los casos.techocristal21

Últimamente, se han presentado en el despacho diferentes casos para trabajar objetivos relacionados cos aspectos laborales en los que ha aparecido de fondo el techo de cristal que impedía a la persona ascender en su empresa a pesar de tener buenas valoraciones, buen feedback y de haber un puesto que ocupar. Sin embargo, a estas personas se les estaba dando largas, ofreciendo excusas, que aunque al principio parecían razones coherentes y de peso, ahondando un poco, se han descubierto como subterfugios para no conceder el ascenso sin ningún motivo congruente, sino con la intención de no hacerlo “nunca”, o al menos en el tiempo prudente para no frustrar al trabajador/a.techode-cristal2

Precisamente, este es uno de los puntos más delicados de este tema, cuando se promete algo que se sabe no se va a cumplir, y que termina desesperando a la persona implicada, ya que ni entiende qué es lo que pasa, qué es lo que está haciendo mal para no lograrlo, además de sentirse humillado/a y menospreciado/a. Es en este punto cuando el trabajador/a se plantea cambiar de trabajo, a veces incluso de profesión, ya que estas situaciones no ocurren de un día para otro, sino que se prolongan en el tiempo, originando muchas veces un deterioro de la autoestima y una pérdida de confianza en el trabajo que se está realizando. Por este motivo, cuanto antes se sea consciente de la verdadera realidad al que uno/a se enfrenta es mejor, ya que el desgaste que supone estar a la espera de algo que no se le va a conceder es muy grande, y poder asumir la realidad hace que se pueda avanzar, valorando cada uno sus posibilidades y determinando los pasos que dar para lograr las metas propias. Porque no poder ascender en una empresa concreta no significa tener que resignarse, sino poder lograr ese u otros objetivos en otros sitios.

 

Temas

Coaching para todos

Sobre el autor


marzo 2018
MTWTFSS
   1234
567891011
12131415161718
19202122232425
262728293031