Cuando me llaman para trabajar en empresas en ocasiones me encuentro con una preocupación por parte de la dirección, por experiencias anteriores no quieren que durante el proceso se abran melones que luego no se puedan cerrar, dejando los conflictos en alto y haciéndolos más patentes en la organización. Es algo muy normal que no se quiera evidenciar una situación a mejorar que luego no se pueda resolver adecuadamente, el problema es que en estos procesos a veces no se permite el tiempo suficiente para poder hacerlo, por lo que hay que hilar muy fino sobre cómo actuar.

Soy consciente que esta situación ocurre, y desde luego no resulta nada profesional que se produzca de esta forma, ya que hay que medir muy bien el tiempo del que se dispone para poder resolver cualquier conflicto que pueda surgir o evidenciarse durante el proceso. Los procedimientos de coaching suelen ser muy efectivos en las organizaciones que se realizan en su mayoría, pero es muy importante definir bien el objetivo del mismo, y hacer que se trabaje hacia esa meta, que aunque puedan surgir nuevos temas, el resultado final sea mejor que el comienzo del mismo, y desde luego, que no se enquisten nuevos problemas.

Tengo que reconocer que a veces la falta de tiempo es un inconveniente muy grande en las organizaciones, y que la limitación del mismo hace que, aunque se quiera realizar un proceso de coaching, no se pueda destinar mucho tiempo a él. Precisamente porque estos procesos son muy potentes y en muchos casos necesarios para poder aclarar situaciones de la empresa, necesitarían dedicárseles más tiempo. Al no poder ser, los coaches debemos ser muy cautelosos y cuidadosos para que el tiempo no se convierta en un enemigo del proceso, y este se pueda completar al menos en la parte en la que se procede.  Ir cerrando cada tema que se desarrolla no sólo es muy importante para no dar pie a que este problema se agrande aún más, sino para que el resultado final del mismo sea un éxito, y pueda retomarse cuando se quiera sin miedo a que surjan nuevas cuestiones de lo ya trabajado.