Como he comentado en otras ocasiones, este blog tiene por finalidad acercaros al mundo del coaching, y sobre todo, haceros más cercana la idea de que los obstáculos, por grandes que nos parezcan, se pueden salvar, logrando llegar a la meta elegida. Por supuesto, tenemos que estar dispuestos a trabajar y esforzarnos por salvar esas barreras, y siempre será nuestra elección la forma de hacerlo, es decir, la actitud que tenemos para ponernos manos a la obra.
Es también verdad, que en ocasiones, por muy positivos que empecemos, el camino nos lleva a desesperarnos, haciendo que nuestro ánimo decaiga. Sin embargo, pese a lo que pese, nos será más fácil superar cualquier situación, si mantenemos una actitud positiva que una negativa.
Trabajar nuestra actitud nos va a proporcionar pasar por cada situación de nuestra vida de una forma más agradable. Sufriendo menos y disfrutando más de lo que la vida nos da. Un claro ejemplo de esto lo podemos tener cualquiera de nosotros alrededor. Pensemos por un momento en alguien que conozcamos y que se pase el día quejándose por todo. No es agradable para quien le escucha, por lo que vamos a hacer lo posible por evitarle, y a la vez sentimos que su vida es peor de lo podría ser si evitara quejarse tanto. Hay veces que las situaciones son las que son, y no dependen de nosotros cambiarlas, pero sí depende de nosotros la forma de afrontarlas.
Por otra parte, nos encanta estar con esas personas que a pesar de sus penas, son capaces de afrontarlas y que cuando estamos con ellas, somos capaces de contagiarnos de su buena energía. ¿Qué es lo que queremos para nosotros mismos? ¿Dejar llevarnos por las lamentaciones o dejar que nuestra energía salga a la luz y ser capaz de transmitirla a los nuestros?
Habrá quien dude de su capacidad para poner en marcha esta actitud positiva que tanto le puede ayudar. Hay veces que nos lamentamos de no poder mantener esta actitud, que nuestra mente nos lo impide, como si nuestra cabeza fuera un ser autónomo a nuestra persona. Deciros que nuestra capacidad mental es muy superior a lo normalmente utilizamos, y que con práctica podemos llegar a ser más positivos de lo que ahora somos. Se trata de entrenar nuestra mente para llegar al objetivo de mantener una actitud positiva ante la vida.