Alberto Moyano
Con rutilante alegría y desmayada inteligencia, la actriz de ‘Cámera
Café’ Carolina Cerezuela se paseaba anoche por Egipto de la mano de ese
programa de La Sexta que responde al irónico nombre de ‘Planeta
finito’. En realidad, el tono habitual es más bien grueso, por
momentos, chabacano.
La actriz, inmersa hasta las trancas en el papel de rubia tonta,
recurrió a lo que, sin duda, es una forma de humor para convertir un
jeroglífico en un culebrón suramericano, un paseo por el mercado de
Khan El Jalili en una versión de ‘Pretty Woman’, y una visita al
interior de la pirámide de Kefren en un sustitutivo del bótox.
Hay que reconocer las habilidades de Cerezuela en la deconstrucción del
viaje organizado: se mareó en los taxis cairotas, se aburrió ante las
tumbas de los reyes y se amedrentó bajo la leyenda de Tutankamón, a la
vez que se interesaba por la posibilidad de que los marcianos hubieran
construido las pirámides. Y todo esto, sin dejar de sonreír, tanto de
frente como de perfil.