“Compañeros y compañeras, Lo primero de todo, agradeceros que hayáis prescindido de los gritos de ‘¡presidente! ¡presidente!’ pese a que sé que me véis como tal, así como que me hayáis ahorrado los rigores del repertorio de Amaral porque, además, no es del todo exacto que sin mí no seáis nada. Algo seríais, aunque sin […]