HARRY POTTER Y LA CÁMARA SECRETA
Título original: Harry Potter and the Chamber of Secrets
Año: 2002
Duración: 154 minutos
País: Reino Unido
Dirección: Chris Columbus
Guion: Steve Kloves (Novela: J.K. Rowling)
Música: John Williams
Fotografía: Roger Pratt
Reparto: Daniel Radcliffe, Rupert Grint, Emma Watson, Kenneth Branagh, Richard Harris,Maggie Smith, Alan Rickman, Julie Walters, Mark Williams, Robbie Coltrane,Tom Felton, Bonnie Wright, Jason Isaacs, Shirley Henderson, Miriam Margolyes,Christian Coulson, Richard Griffiths, Fiona Shaw, David Bradley, Matthew Lewis,John Cleese, Robert Hardy, Warwick Davis, Gemma Jones, Harry Melling,James Phelps, Oliver Phelps y Sean Biggerstaff
Productora: Warner Bros.
Género: Fantástico / Aventuras
Las hazañas de nuestro héroe ya se han extendido por todo el colegio, convirtiéndolo en el centro de una atención no deseada. Entre sus nuevos admiradores está Ginny, la hermana pequeña de Ron; el aspirante a fotógrafo Colin Creevey y Gilderoy Lockhart, el nuevo y vanidoso profesor de defensa contra las artes oscuras. Sin embargo, ni siquiera Lockhart puede ofrecer una explicación plausible ni una solución eficaz para combatir el terror que se está apoderando del colegio. En tal circunstancia, la atención se centra en Harry, pero todos empiezan a dudar de él. Todos, excepto Ron, Hermione y la pequeña y frágil Ginny, que vive volcada en su nuevo y misterioso diario. Pero Harry no decepcionará a sus amigos y se enfrentará a la oscura fuerza que acecha Hogwarts. (FilmAffinity)
Tomando en consideración el transcurso de la saga, ‘Harry Potter y la cámara secreta’ es un episodio mucho más importante de lo que parece a simple vista. Junto a los episodios 6 y 7 (7 y 8 tomando la línea de las películas) sienta las principales bases de lo que será la conclusión de la historia y nos da las claves para comprender a Voldemort. Si como película queda en un plano inferior a su predecesora, con toda la franquicia finalizada recobra su brillantez.
La película, como casi toda la saga, sigue la misma estructura de inicio en el mundo muggle, traslado a la escuela y conclusión. En este caso la película aborda temáticas como el racismo (a modo de sangre puras y mestizos -los nacidos de magos o de magos y muggles- y los sangre sucia -los nacidos de muggles-), la muerte, los prejuicios, los juicios injustos o la exclavitud. Además de los habituales de la amistad, el compañerismo, la lealtad, etc.
Como durante toda la franquicia, las novedades van apareciendo en pequeñas píldoras, agrandando el mundo mágico cada vez más. En esta ocasión nos topamos con elementos como el sauce boxeador, un coche volador, los duelos de magos o nuevos profesores, entre los que destaca el espectacularmente bien interpretado Gilderoy Lockhart, por un sublime Kenneth Branagh. Hay pocos personajes con tan poco papel en la saga y que hayan quedado para la posteridad en la memoria de todos. El actor hace tan bien el papel más satírico y mordaz de los que haya escrito jamás J.K. Rowling, un zasca a todos estos escritores de pacotilla que venden más su imagen que su literatura.
El humor pierde en esta película espacio en favor de una mayor oscuridad. Chris Columbus entiende el material original en el que se basa la película y cede la luminosidad de la primera película en favor de una narración más tenebrosa. Aunque todavía no es la película adolescente que será entre las entregas 3 y 6 o las adultas 7 y 8, sí que se comienza a percibir un tono más acorde a lo que vendrá en futuros episodios.
Si bien sienta las bases para el futuro, también es verdad que la narración pierde la frescura de su predecesora. Mejora en las escenas de acción, se notan más depuradas. Aunque es en un guion más pesado y unos efectos especiales más dudosos donde radica el lado negativo de la cinta.
Juega también en su contra las pocas escenas míticas con las que cuenta. A excepción de las escenas de Gilderoy Lockhart y el elfo doméstico Dobby, ‘Harry Potter y la cámara secreta’ es más consistente como historia en el libro, siendo un interesante thriller juvenil, pero una película menos brillante y más predecible que ‘Harry Potter y la piedra filosofal‘.
Lo mejor: Gilderoy Lockhart.
Lo peor: No brilla igual que la primera parte.