Como anuncié en el post de la semana pasada, a partir de ahora este blog contará con la colaboración de los veterinarios de la Clínica Lardy. Encontrareis los textos de estos profesionales publicados aquí cada viernes: unas semanas contestarán a consultas que nos hayáis mandado vosotros previamente al correo y otras escribirán sobre interesantes temas acerca de la salud de nuestros animales. Los que queráis hacerles una consulta, podéis escribir al correo electrónico del blog (unomasenlafamiliablog@gmail.com) y yo se la haré llegar a ellos.
Hoy nos hablan sobre un tema muy interesante y al que en breve tendremos que prestar mucha atención puesto que ya se acercan las subidas de temperatura (nos acercamos a la primavera): las pulgas en perros y gatos. Un tema que, sin duda, nos preocupa a todos los propietarios de ambos tipos de animales.
“Las pulgas constituyen una de las afecciones más comunes de perros y gatos en todo el mundo y sus picaduras provocan molestias, lesiones y enfermedades a los animales.
Las pulgas necesitan sobretodo 2 condiciones para desarrollar su ciclo vital: humedad y temperatura. Dentro de poco empezará a llegar el verano y consigo una nueva estación de pulgas.
Existen alrededor de 2000 especies diferentes de pulgas, la mas común en nuestras mascotas es la pulga del gato (Ctenocephalides felis felis) y constituye el 90% de las pulgas que podemos encontrar en los perros. Esto se debe a que en origen es un parásito del gato y empezó a elegir al perro cuando el hombre empezó a convivir con ambos animales.
Estos parásitos se alimentan con sangre de nuestros animales en períodos que varían desde 20 minutos hasta 2 horas y pueden llegar a tener un período de ayuno de hasta 18 meses. Después de comer la pulga hembra deposita entre 15 y 20 huevos por día hasta llegar a los 600 en toda su vida. Estos huevos se depositan en las alfombras, moquetas, sofá, madera… y pueden quedar aletargados hasta 1 año.
Las pulgas al ser tan pequeñas y rápidas son muy difíciles de detectar por lo que lo más fácil es ver sus deyecciones. Estas son como posos de café en las zonas del lomo-dorso y abdomen así como en cuello y cabeza en las mascotas más jóvenes. Hemos de tener en cuenta que por cada 5 pulgas que veamos hay 95 en nuestro hogar en diferentes fases como huevo, larva o pupa.
Normalmente nuestra mascota no nota la picadura ya que la saliva de la pulga es como una anestesia local que insensibiliza la zona, aunque hay muchos a los que esta saliva les produce una reacción alérgica y de ahí que se rasquen excesivamente. Las pulgas pueden causar prurito y dermatitis como reacción alérgica a la saliva de estos parásitos, causar anemia e incluso la muerte en animales jóvenes cuando la infestación es muy grande.
También pueden transmitir una tenia llamada Diphylidium caninum. Cuando el perro o el gato se comen una pulga al morderse por el picor que estas les ocasionan, ingieren la tenia en forma de larva y esta se desarrolla en el aparato digestivo de la mascota pudiendo transmitirla a los seres humanos.
Por todo esto y mucho más es muy importante tratar tanto nuestro animal como el hogar en el que habita. En el mercado existen multitud de productos que actúan bien sobre la fase adulta o sobre la fase larvaria. Combinándolos obtendremos un mejor control de esta parasitosis. Su veterinario le informará acerca de los productos mas convenientes para cada caso concreto.”