Más o menos con un letrero similar debió empezar la historia de Pipo y Koki. Hace unos meses, un hombre que trabajaba en una empresa de desratización de Madrid yendo a hacer su trabajo en un club de alterne se encontró a unos perros atados en el patio de dicho local que tenían unas garrapatas de tal tamaño que no podían abrir los ojos. Este hombre preguntó al dueño del local que para tener los perros así, para qué los tenía. Cuál fue su sorpresa cuando este hombre le dijo que cuando adquirió el local, se encontró con los dos perros amarrados en dicho patio. El dueño del club de alterne dijo que pensaba sacrificar a ambos perros “de una pedrada en la cabeza”, así que el hombre que trabajaba en la desratización del lugar se los llevó para salvarles la vida.

Ambos perros pensaron que por fin se habían salvado, pero… Este hombre llevó a Pipo y a Koki (nombre con el que han sido bautizados nuestros protagonistas) a un picadero en el que, además de caballos, tenían varios mastines. El problema es que los mastines eran tan dominantes que hacían la vida imposible a Pipo y a Koki (tan buenos que ni se defendían). Además, como este hombre no iba al picadero todos los días, les dejaba pienso para varios días, pero los mastines no dejaban que Pipo y Koki probaran ni un grano. Una chica vio que Pipo y Koki se habían quedado en los huesos y que, o morían por desnutricion, o morían a manos de los mastines, así que los sacó del picadero y se los llevó a una finca con caballos que tenía ella.

El problema es que esta chica pasaba muchos días sin ir a esa finca y pese a que Pipo y Koki tenían sus necesidades de comida y agua cubiertas, ambos buscan mucho el afecto del ser humano así que un día decidieron escaparse en busca de alguien que les diese mimos. La chica que los tenía se llevó un disgusto impresionante. Pusieron carteles por toda la zona y Pipo y Koki no aparecían. De repente, un mes después de su desaparición la policía municipal llamó a esta chica diciendo que había encontrado a los dos perros en un polideportivo buscando entre la basura… ¡¡¡seguían juntos!!!

Como no tenían chip, Pipo y Koki fueron llevados a una perrera de Madrid. La chica que ahora se encarga de buscarles hogar les puso chip a su nombre para que no les pasase nada y se encarga de todos sus cuidados. Pero Pipo y Koki necesitan ya una familia que los quiere para siempre, no seguir pasando de mano en mano viendo cómo todo el mundo se olvida de ellos. Además, la perrera en la que están actualmente tiene una muy dudosa reputación, pero la chica que los mantiene no se puede permitir pagar residencia para dos perros.

Esta chica está buscando una buena familia para Pipo y Koki (bien juntos o por separado), pero los meses pasan y nadie se interesa por ellos. Si al menos uno de ellos fuese adoptado, la chica podría pagar la residencia del otro.

Pipo es un mestizo (parece de mastín) de tamaño similar al de un pastor alemán. Le calculan menos de un año y es un cachorrote mimosón y juguetón con muy muy buen carácter.

Koki es un mestizo de sabueso con un cuerpo similar al de un bóxer. Tiene alrededor de dos años y es un perro muy cariñoso y tranquilo.

Pese a lo que han pasado, ambos tienen un carácter buenísimo y son super adoptables, no están nada maleados.

Pese a que Pipo y Koki se encuentran actualmente en Madrid, la chica que les busca hogar se compromete a traerlos personalmente e incluso encargarse ella de la castración si fuese necesario. Está dispuesta a hacer todo lo que esté en su mano porque estos chicos tengan por fin el hogar definitivo que merecen (ya sean juntos o por separado). Pese a que siempre han vivido juntos y se llevan genial (para muestra, que después de un mes desaparecidos apareciesen juntos), no tienen nada de dependencia el uno del otro y se les puede adoptar por separado perfectamente.

Si quieres adoptar a Pipo o a Koki (o a los dos), llama al 629-508-781.

Hoy jueves puedes escuchar la historia de Pipo y Koki en Punto Radio Gipuzkoa (106.2 fm o a través de la web de diariovasco.com para las personas de fuera de Gipuzkoa).  Podrás escuchar a Victoria, la chica que se encarga del cuidado diario de estos perros (o sea, la persona que mejor los conoce), hablar sobre ellos. Pipo y Koki estarán en Punto Radio Gipuzkoa entre las 11:00 y las 13:00. Además, podrás escuchar a los adoptantes de Timba escuchar cómo les va con la perrita.

Ahí va el corte de radio en el Victoria, persona que se encarga de todos los cuidados de Pipo y Koki, nos habla sobre cómo son estos perros: http://www.diariovasco.com/multimedia/audios/ultimos/2156739-adopciones-perros-punto-radio-gipuzkoa.html

Os pongo fotos y un vídeo de Pipo y Koki para que conozcáis más a estos guapetones por los que nadie pregunta: