Los Pilares de la Tierra: la problemática construcción de una gran catedral medieval

Viernes, 16 octubre 2020, 06:00

Las grandes miniseries tuvieron su época de máximo esplendor a finales de los años setenta y en la década de los ochenta donde congregaban a decenas de millones de espectadores durante varios días consecutivos como un evento especial. Su caída en desgracia en los noventa y con la llegada del nuevo siglo empezó a revertirse a principios de esta década con el estreno de ‘Los Pilares de la Tierra’ que mostró que todavía existía un público para esas grandes superproducciones que han vuelto con plena fuerza estos últimos años.

Hoy vamos a dedicar nuestro rincón del recuerdo de cada viernes para hablarles de esa gran miniserie ‘Los Pilares de la Tierra’ que ha sido injustamente olvidada en el recuerdo de muchas personas que la vieron en su momento o que simplemente ni se enteraron de su existencia.

La gran popularidad del libro de Ken Follett en la que está basada, eclipsó en parte a la miniserie, al estar muchas personas más pendientes de compararla con el libro que en valorarla como obra audiovisual independiente.

Su estreno en nuestro país fue un enorme éxito para la cadena Cuatro con shares por encima del 20% nada habituales en la audiencias de esa cadena. Además viéndola con perspectiva, su gran reparto ha ganado en prestigio con el tiempo como los buenos vinos y tras verla recientemente puedo asegurarles que ha envejecido a la perfección, como les voy a analizar a continuación.

Ficha: Los Pilares de la Tierra ( The Pillars of the Earth) 8 ep. 50 m Jul 2010- Ago 2010 Cadena:  Starz(USA) / Cuatro (E)

Sinopsis: En la Inglaterra del siglo XII, las luchas eran constantes entre todos los condados y ducados vecinos en un periodo conocido históricamente como La Anarquía. En medio de ese caos, un grupo de religiosos y de fieles tiene la intención de construir una gran catedral en la ficticia ciudad de Knigthsbridge enfrentándose a grandes retos tanto religiosos como políticos.

La historia de la construcción de esa catedral durante bastantes décadas es el centro de esta historia de aventuras medievales en el contexto del drama histórico.

El inicio:
Ken Follett es un escritor gales que se ha convertido en un prolífico autor de best-sellers desde que a finales de los años 70 publicó su primer gran éxito el thriller ‘El Ojo de la Aguja’, al que siguieron bastantes novelas del mismo estilo. En 1989 decidió cambiar de género y pasarse al drama histórico con la publicación de ‘Los Pilares de la Tierra’ que lo encumbró a nivel mundial.

A pesar del éxito de la adaptación cinematográfica de ‘El Ojo de la Aguja’, Follett no quedó muy contento  de esa primera experiencia  porque en  la compresión de su densa novela en apenas 90 minutos, se perdieron  muchos detalles, por lo que decidió tener un mayor control sobre las futuras adaptaciones de sus obras.

Tras varios intentos infructuosos, Follett decidió aceptar la oferta de la productora de Ridley y Tony Scott para adaptar ‘Los Pilares de la Tierra’ pero en un formato de miniserie de ocho horas, para dar cabida a toda la densidad y longitud de su historia. Pronto entró como socia principal del proyecto la productora alemana Tandem, por ser un país donde Ken Follett es un auténtico ídolo de masas y la canadiense Muse para entrar en el mercado americano.

La decisión más complicada fue encontrar al guionista que iba a adaptar tan magna obra y finalmente optaron, con el beneplácito de Ken Follett ( izq), por el dramaturgo estadounidense John Pielmeier ( der) que alternaba la escritura de obras de teatro en Broadway con guiones de prestigiosas películas televisivas y que también acabó actuando en la serie.

Tras escribir Pielmeier el guión en solitario de los ocho episodios, ficharon como director al croata Sergio Mimica-Gezzan que había aprendido el oficio como primer ayudante de dirección de Steven Spielberg en todas sus grandes películas del siglo XX.

Tras reunir un gran presupuesto de 40 millones de dólares, rodaron en Hungría para reproducir hasta el último detalle el poblado y el proceso de construcción de  la catedral medieval que iba a centrar la historia.

Tras venderla rápidamente a muchas cadenas europeas, les costó algo más encontrar una cadena estadounidense siendo finalmente la cadena de pago premium Starz la que se le llevó el premio gordo, buscando aumentar su reconocimiento popular frente a su competencia en ese terreno como son HBO y Showtime.

Starz la estrenó en pleno verano estadounidense, buscando la época de menor competencia televisiva y lo hizo con el siguiente trailer.

La trama:
‘Los Pilares de la Tierra’ es una novela rio medieval que en lugar de tener la historias de una familia como hilo conductor a través de los años lo hace mediante la construcción de la catedral que articula toda las tramas tanto políticas como religiosas.

La cabecera de la serie nos introduce en la titánica tarea de construir la catedral y es una primera presentación de los nombres del gran reparto que iremos viendo a lo largo de toda la miniserie.

‘Los Pilares de la Tierra’ tiene tres tipos de niveles para desarrollar sus personajes, en primer lugar tenemos las tramas políticas que utilizan el recurso habitual de la usurpación de un cargo ( del rey de Inglaterra, de un condado), para montar la lucha de los legítimos herederos para recuperar sus derechos. En ese terreno tenemos todo tipo de alianzas, traiciones y batallas con las líneas entre ‘buenos’ y ‘ malos’ muy bien delimitadas, para que no tengamos dudas del bando al que hay que apoyar.

En un segundo nivel y paralelo al primero tenemos las intrigas religiosas que enfrentan al obispo local con los austeros clérigos del monasterio de Knigthsbridge, para llevarse los honores de la construcción de la catedral en especial a lo referente a la recaudación de fondos y de personal para poder erigirla. En este punto destaca Ian McShane, como el malvado y ambicioso obispo Waleran, en un papel ideal para este gran actor como explica en el siguiente corte.

Por último tenemos el nivel arquitectónico con Tom Builder el maestro de obra encargado de erigir la catedral basándose en su experiencia y saber hacer, para calcular a ojo , el grosor y la altura de las columnas y sobre todo la sustentación del techo y las bóvedas para resistir la lluvia y el viento.

Sin estar referidos a ningún nivel tenemos a los campesinos y comerciantes de Knigthsbridge que hacen una especie de alianza con los religiosos, porque la construcción de una catedral atrae a muchos fieles y eso revaloriza mucho el mercado y los negocios locales y no dudan en colaborar monetáriamente y con mano de obra para construirla.

Con esos cuatro pilares se construye la serie, arriostrados por algunas historias románticas de amores imposibles y prohibidos que se desarrollan entre todas las trifulcas y batallas que se producen, mediante la celebración de bailes como el del siguiente vídeo

Construir una catedral no es una tarea sencilla y muchas veces se tiene que seguir el método de ensayo y error, lo que puede conllevar catástrofes parciales como el colapso que sufrieron a mitad de construcción y que refleja de forma espectacular el siguiente corte.

Una ventaja del formato de miniseries es que puede permitirse un nivel de mortalidad elevado al no tener que estar pendientes de su renovación, por lo que una buena recomendación en no cogerle mucho cariño a todos los personajes porque sobrevivir en el medievo ingles es harto complicado.

El reparto es una verdadera maravilla con muchos actores que son mucho más conocidos ahora que cuando hicieron la miniserie como es el caso de Eddie Redmayne ( seg izq) , que es  toda una estrella cinematográfica y oscarizada gracias a ‘La Chica Danesa’ y  que se dio a conocer con el personaje de Jack, el escultor de confianza del maestro de obra.

A su lado está la gran Hayley Atwell que interpreta a la noble hija del conde Bartholomew ( el insigne Donald Sutherland, izq) en su primer papel importante antes de convertirse en la agente Carter del universo televisivo y cinematográfico de Marvel.

A la derecha tenemos al gran Ian McShane, ideal para los personajes del villano residente, en esta ocasión como el maquiavélico obispo Waleran, en la línea de su Hal Swearengen de ‘Deadwood’ y otros villanos similares.

También hay que destacar a dos grandes actores británicos Matthew McFayden ( izq) y Rufus Sewell ( centro) que interpretan respectivamente al promotor religioso principal, el prior Phillip de la abadía de Knigthsbridge y al maestro de obra Tom Builder

En ambos casos sus caras se han vuelto enormemente populares, McFayden gracias al bombazo que está siendo ‘Succession’ , mientras que Rufus Sewell entre ‘Victoria’ y ‘The Man in the High Castle’ casi siempre ronda por nuestras pantallas.

Debo reconocer que es otro de esos casos como me sucedió con ‘De la Tierra a la Luna’ que se me traspapeló en su momento por no estar en España en el momento de su emisión, pero me ha encantado verla con ojos actuales, primero para disfrutar con ese gran reparto antes de explotar en muchos casos y por la trama tan entretenida y densa que tiene.

Sus aventuras medievales transcurren a un gran ritmo sin tiempo para aburrirnos y el gran presupuesto que han dedicado se nota tanto en las escenas bélicas como en la reproducción de la catedral y lo cierto es que me lo he pasado en grande viendo una miniserie como las de antes, pero con técnicas actuales a pesar de tener  una década de antigúedad.

Para finalizar este apartado les dejo con un vídeo sobre el interesante rodaje de la serie en tierras húngaras

Final.
Se habrán percatado que no he comparado en ningún momento la miniserie con la obra literaria, porque como me suele ocurrir  en estos casos no la he leído y no la puedo comparar, pero si buscan van a encontrar mucha gente que se ha dedicado a escudriñar hasta el último detalle.

Posteriormente se rodó una secuela en forma de miniserie ‘ World Without End’ fiel al segundo libro de Ken Follett, pero no tuvo la misma repercusión y me abstengo de opinar sobre ella al no haberla visto.

No me consta que ‘ Los Pilares de la Tierra’ esté actualmente disponible en alguna plataforma, pero siempre les quedará la opción del DVD que es como yo la he visto, para conocer que merece mucho más reconocimiento por su gran calidad.

Para finalizar nada mejor que ver la escena final de la serie, donde juegan con un plano real de la majestuosa catedral de Salisbury que fue la inspiración de Ken Follett al escribir su novela

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Lorenzo Mejino