Los Bridgerton: folletines decimonónicos actualizados

Miércoles, 7 abril 2021, 06:00

Una de las tendencias preferidas de las nuevas plataformas televisivas es encargar series históricas de época pero modernizadas y actualizadas según las preferencias actuales de las jóvenes generaciones, tanto a nivel de música como de diversidad étnica y sexual, con ‘Los Bridgerton’ como uno de los máximos exponentes de esta reinvención actualizada de los folletines decimonónicos.

Estas reconstrucciones modernizadas suelen polarizar bastantes las reacciones de los espectadores, desde los puristas que  consideran una falta de respeto y una tomadura de pelo todas las licencias que se toman en ese tipo de adaptaciones, hasta los enfervorizadores seguidores que aplauden hasta con las orejas la puesta al día de historias clásicas.

En mi caso, todo suele depender de las intenciones y de la ejecución, en el caso de ‘Los Bridgerton’  me ha dado la sensación de que nunca se tomaba a si misma muy en serio, dejando clara esa creación de su propio universo paralelo desde el principio y que funciona mucho mejor como un entretenimiento distendido de alto nivel que como una recreación de la época austeniana y de la regencia británica.

Las reacciones del público generalista parece que han sido bastante positivas y sobre todo han lanzado al estrellato a su protagonista Regé-Jean Page que se ha convertido en el hombre de moda de 2021, a pesar de que ya ha confirmado que no seguirá en la serie al haber firmado un contrato de solo un año,  como les vamos a explicar a continuación,

Ficha: Los Bridgerton 8ep+ 60 m   Oct 2020- Cadena: Netflix (E)

Sinopsis:  En el Londres de la Regencia de 1813, una anónima lengua viperina Lady Whistledown publica una gacetilla sobre todos los chismorreos de la alta sociedad londinense de la época que es devorada con fruición por todo el mundo, encantados de conocer todos los detalles secretos de la aristocracia londinense

Uno de sus objetivos preferidos son dos familias, por un lado los Bridgerton, encabezada por una viuda con ocho hijos, cuatro chicos y  cuatro chicas, que está muy ilusionada por el inicio de la temporada de bailes y cortejos, por la posibilidad de poder colocar a su hija mayor Daphne en la que tiene puestas grandes ilusiones para encontrar un buen partido.

A su lado tenemos a los Fetherington con una ambiciosa madre que intenta colocar también a alguna de sus tres hijas con algún personaje importante de la corte, aunque no lo tiene fácil al ser bastante desaliñadas y sin demasiado carisma.

La vida de esas dos familias y de esa temporada de ‘apareamiento’ se ve completamente convulsionada por la llegada de un enigmático aristócrata, el duque de Hastings, que va a revolucionar a todas las hijas casaderas con su porte y prestancia, proporcionando enorme munición a la gacetilla de Lady Whistledown.

El inicio: Shonda Rhimes firmó hace tres años uno de los contratos más lucrativos de la historia con el gigante del streaming Netflix, para crear y producir series originales. En la búsqueda inicial de posibles temas a desarrollar llegó a sus manos la saga de libros ‘Bridgerton’ escrita por Julia Quinn, que era todo un superventas con nueve volúmenes publicados.

Tras leerlos, le pidió a una de sus personas de confianza, el guionista Chris Van Dusen, con el que había trabajado muchos años en ‘Anatomía de Grey’ y ‘Scandal’ que estudiara la posibilidad de desarrollar una serie a partir de ese universo tan completo que había creado en sus libros Julia Quinn.

Van Dusen deseaba alejarse de las intrigas políticas de Washington  de ‘Scandal’ sobre las que había estado escribiendo muchos años y empezó a devorar los libros que le había pasado Shonda Rhimes, viendo un reguero de enormes posibilidades para desarrollar una serie de larga duración, al estar cada uno de los libros centrado en la figura de uno de los ocho hijos de la viuda Bridgerton.

Su enfoque fue modernizar y actualizar la historia para que el público actual se pudiera identificar mejor con las historias pero manteniendo el aspecto de drama de época a nivel de ambientación y vestuario. Desde el principio  Chris Van Dusen tuvo muy claro que no quería hacer un documental ni una clase de historia sobre la regencia, buscando el escapismo y el divertimento como sus principales bazas para conquistar al público.

Buscando una mayor autenticidad rodaron en escenarios naturales en Londres y Bath, para recrear mejor esa época y con un reparto con una enorme diversidad racial, empezando por la propia reina Charlotte  de raza negra, lo que empezó a sulfurar a los puristas y defensores de la autenticidad histórica, en especial cuando vieron el primer tráiler de ‘Los Bridgerton’

Aunque acabaron el rodaje en Londres poco antes del inicio de la pandemia, todo el proceso de postproducción se vio bastante afectado por las restricciones, por lo que en una hábil maniobra, Netflix decidió estrenarla el día de Navidad de 2020, al ser  un producto ideal para devorar durante unas fiestas navideñas muy marcadas por el aislamiento social en todo el mundo, obteniendo un éxito arrollador siempre según los datos proporcionados por la propia compañía.

La trama: Aunque no me gusta definir las series utilizando referencias de otras series, en este caso lo más sencillo es decir que han hecho una mezcla de ‘Gossip Girl’ , ‘Orgullo y Perjuicio’ y ‘Scandal’, con elementos claramente inspirados en esos tres éxitos televisivos.

La presencia misteriosa de esa cotilla oficial del reino  se convierte poco a poco en una de las tramas principales de la historia para conocer quién se esconde detrás de ese seudónimo de Lady Whistleblown. No deja de ser un claro guiño a la premisa de ‘Gossip Girl’, mientras que la ambientación en esa época de la Regencia para desarrollar una historia romántica aparentemente imposible es clara deudora del universo de Jane Austen en ‘Orgullo y Prejuicio ‘.

Por último nada mejor que tener una corte llena de conspiradores y pugnas a todos los niveles para buscar todo tipo de escándalos como en ‘Scandal’ pero que en esa época solo pueden ser expuestos a los cuatro vientos por esa descubridora de secretos que es Lady Whistleblown.

‘Los Bridgerton’ necesita un cierto tiempo para presentar a la enorme de cantidad de personajes que se van a ir turnando en la pantalla, empezando por los once vástagos que tienen entre las dos familias principales los Bridgerton y los Fetherington, con siete chicas cuyo destino a corto y largo plazo es encontrar un marido.

Si a todo ese enorme núcleo, les añadimos los padres y familiares cercanos y toda la gente de la corte empezando por la reina y los posibles pretendientes de todas las chicas, tenemos a un gran numero de  personajes que cuesta diferenciarlos en las primeras entregas.

Por suerte, en esta 1T se centran en dos tramas principales, el desenmascaramiento de la autora anónima y especialmente en la historia de amor entre Daphne la hija mayor de los Bridgerton y el apuesto duque de Hastings. Simon Bassett, íntimo amigo del primogénito de los Bridgerton, Anthony.

‘Los Bridgerton’ va avanzando a base de bailes, por lo que los preparativos, el propio baile y las consecuencias posteriores es el procedimiento utilizado para desarrollar a los personajes, en especial a nivel amoroso, como pueden ver en el siguiente video, sobre la preparación de uno de los bailes.

El punto de inflexión inicial que sirve como detonante de toda la trama es el baile de presentación de las debutantes frente a la reina, con el momento álgido en que elige a la joven y delicada Daphne como su favorita para la temporada.

Esa elección es todo un aval para despertar a todos los pretendientes que intentan conquistar a la abrumada Daphne con todo tipo de agasajos y regalos para cortejarla, ante la atenta mirada de su hermano mayor que hace de celoso guardia de tráfico ante el aluvión de propuestas.

De todas formas todo cambia con la entrada en escena del casadero Duque de Hastings y su relación con Daphne que preocupa y mucho a su hermano, llegando a tener una dura pugna entre esos dos viejos amigos como pueden ver en el siguiente video.

En el otro lado de la balanza y como punto de contraste frente a los sobrios Bridgerton, tenemos a las mujeres Fetherington que se distinguen principalmente por la elección de un vestuario muy colorido con un aspecto muy chillón, que las hace destacar en todo momento, pero no siempre en un aspecto positivo.

La diferenciación de los personajes a través de su vestuario es uno de los aspectos más cuidados de ‘Los Bridgerton’ en especial al tener un reparto principal de veinte personajes, por lo que en cualquier escena de masas, vamos a poder diferenciar a los diferentes clanes a partir de sus colores propios, como explican en el siguiente video.

Entre las Fetherington la más destacable es Penélope, la más lista e inteligente de todas las chicas de la serie, pero que no atrae las miradas de tantos pretendientes como sus hermanas por su aspecto físico. Mantiene una excelente relación con dos de los hermanos Bridgerton, la espabilada Eloise y sobre todo Colin, el tercer hijo, como pueden comprobar a continuación.

Lo primero que llama poderosamente la atención es la enorme diversidad racial del reparto, no tanto en el de las dos familias principales, sino en el resto de los personajes secundarios y de la corte. No voy a entrar a analizar sobre la exactitud histórica de esa libertad creativa pero si en valorar el resultado que por un lado nos ha proporcionado el mejor personaje de la serie y de lejos y por otro el peor y también de largo.

No he entendido lo que han pretendido con la elección de Golda Rosheuvel para interpretar a la reina Charlotte, pero la actriz más allá del color de su piel, está espantosa en todas las escenas en que aparece, alternando una inexpresividad pertinaz con unos mohines fuera de lugar, que me hacían desear fervientemente la caída de la monarquía británica

Por suerte la presencia y el descubrimiento a nivel popular de Regé-Jean Page como el galán Duque de Hastings, ha sido todo un bálsamo para ‘Los Bridgerton’, puesto que su sola presencia era capaz de despertar unas pasiones similares a las que provocaba en la joven Daphne, como pueden comprobar en el siguiente video que recopila los momentos en los que generaba más suspiros, independientemente de la tendencia sexual del espectador.

Al no ser muy purista, no he tenido muchos problemas con esta reinvención histórica posmoderna, al tomármelo de forma exclusiva como un pasatiempo para rellenar horas sin intentar buscar unas interpretaciones o una simbología que no creo que ni existan.

Por ello he preferido entretenerme en esos aspectos más anacrónicos, como la rapidez de las conversaciones mezclada con un cierto respeto por las convenciones sociales de la época, pero introduciendo algunos modismos modernos como nos enseñan los propios personajes en el siguiente video.

Su mayor virtud es similar a todas las series de Shonda Rhimes, una producción impecable y una enorme capacidad de quemar tramas para atrapar al espectador y hacerle partícipe de las vicisitudes de sus personajes, en especial en este caso de su pareja protagonista, para que no tenga un momento de aburrimiento.

Otra cosa es que se olvide a la semana de lo que ha visto, pero siempre puede volver a verla, lo que no deja de ser una de las grandes ventajas de Netflix.

Los actores :

Phoebe Dynevor es una joven actriz británica que empezó como actriz infantil, para hacer una transición bastante fluida a papeles adultos en series como ‘Snatch’ o incluso como una joven irlandesa en ‘Younger’, pero nada comparable a este personaje que puede hacer despegar su carrera.

Su aspecto delicado y suave, pero que esconde una gran tozudez y fortaleza interior es ideal para la heroína romántica que no deja de ser Daphne, en especial en esa extraña relación con ese elusivo duque de Hastings, con el que tiene una gran química en pantalla con sus amoríos, peleas y reconciliaciones.

La gran revelación de la serie ha sido indudablemente Regé-Jean Page, un actor anglo-zimbabuense que ha conseguido que su Duque de Hastings haya sido uno de los personajes de la temporada televisiva, tanto por sus dotes como actor, como por su porte físico.

Tras crecer en Zimbabue de donde es originaria su madre, volvió a Londres donde empezó a tener pequeños papeles en series hasta conseguir el personaje del joven gallo George en el remake de ‘Raices’ que llamó la atención de Shonda Rhimes que no dudó en darle el papel de un fiscal muy estirado en su serie judicial apenas conocida ‘For The People’.

En el momento de elegir el reparto de ‘Los Bridgerton’, la megaproductora no tuvo ninguna duda en elegirlo para el papel más importante de su vida que le ha abierto las puertas incluso a estar como invitado semanal en el venerable ‘Saturday Night Live’ un honor poco común para un casi debutante y que demuestra lo fuerte que ha pegado su serie en los EEUU. Su  salida confirmada de la serie le abre todo un abanico de posibilidades que tengo curiosidad por ver si las sabe aprovechar o se convierte en otra estrella fugaz televisiva.

No voy a mencionar a los veinte personajes principales de la serie, pero si hacer una mención especial a la gran actriz irlandesa Nicola Coghlan ( der) que interpreta a Penélope Fetherington, que se come en todas las escenas a sus dos sosainas hermanas.

Coghlan ha tenido una carrera muy curiosa, tras estar muchos años sin conseguir sacar la cabeza como actriz, por lo que tenía que trabajar en una óptica para poder sobrevivir. A los 31 años consiguió dos personajes que cambiaron su carrera, en primer lugar una prostituta en el drama de época ‘Harlots’ pero sobre todo el de Clare, una de las alocadas adolescentes de la sublime ‘Derry Girls’ .

Su Penelope Fetherington demuestra que es una actriz con un registro mucho más amplio que el de la comedia, siendo el personaje más interesante más allá de la pareja protagonista de esta primera entrega.

Final : ‘Los Bridgerton’ ya ha sido renovada para una 2T y teniendo en cuenta que la saga literaria cuenta con nueve libros, cada uno de los ocho primeros dedicado a uno de los ocho hijos, puede tener entretenimiento hasta el final de la década, con ese gran precedente de la enorme duración de las series de su productora ejecutiva Shonda Rhimes.

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Lorenzo Mejino