Maid ( La Asistenta) : El laberinto legal de las ayudas sociales

Miércoles, 1 diciembre 2021, 06:00

Las enormes desigualdades existentes en los EEUU hacen que muchas personas subsistan como pueden por debajo del umbral de la pobreza, sin apenas posibilidades de poder salir de ese profundo pozo sin ayudas publicas o programas sociales. ‘La asistenta’ narra la odisea de una joven madre atrapada en ese laberinto legal de la beneficencia, por lo que no duda en limpiar mansiones y casas para obtener algo de dinero para sacar a su hija adelante.

Su protagonista Alex Russell es un magnifico ejemplo de  una persona que intenta sobreponerse a todas las adversidades que se encuentra, sin perder la dignidad y sacrificando todo para poder darle la mejor vida posible a su hija de dos años Maddie.

La conmovedora e impresionante interpretación de Margaret Qualley, en el papel de Alex. eleva el nivel de ‘La Asistenta’ a la zona alta de las listas de las  mejores series del año, que están preparando muchas personas para finalizar 2021.

Ficha: La Asistenta ( Maid) 10 ep 60min oct 2021 – Netflix ( USA / E)

Sinopsis: Alex Russell es una joven madre que vive en la localidad costera de Port Townsend en el estado de Washington. que harta del comportamiento abusivo-emocional del alcohólico Sean, el padre de su hija de dos años Maddie, decide huir en mitad de la noche con su hija para alejarse de esa mala influencia, pero sin saber dónde ir.

Tras acudir a una trabajadora social que le indica el laberinto legal que necesita para acceder a una vivienda de acogida de mujeres maltratadas, Alex empieza a trabajar como asistenta por horas en las grandes mansiones de la cercana isla de Fisher para poder tener algo de dinero.

En paralelo empieza toda un peregrinaje para encontrar una guardería para su hija mientras trabaja, así como un techo para cobijarse, recurriendo a su familia y a los amigos para meterse en cualquier habitación que le presten para una noche o unos días.

El inicio: El año 2019, la escritora Stephanie Land publicó su primer libro ‘Maid: Hard Work, Low Pay and a Mother’s Will to Survive que narraba sus experiencias personales como limpiadora de casas y su vida en la pobreza extrema. El libro fue un gran éxito y estuvo varias semanas en la lista de los libros más vendidos del New York Times.

El libro llamó la atención de la actriz australiana Margot Robbie que imitando a  su compatriota Nicole Kidman había creado su propia  productora LuckyChap, junto a su marido Tom Ackerley para diversificar y controlar mejor su carrera. Robbie compró los derechos del libro junto a un buen amigo el experimentado y brillante productor John Wells (El Ala Oeste de la Casa Blanca, Shameless) para desarrollarlo en forma de miniserie.

En el momento de elegir a la persona que iba a ser la responsable de la adaptación, John Wells pensó en Molly Smith Metzler, una dramaturga que se había pasado a la escritura televisiva y era una de las guionistas de su serie ‘Shameless’ entregándole el libro en la misma sala de guionistas de la serie.

Molly Smith Metzler se entusiasmó con el libro y empezó a desarrollar toda la adaptación bajo la tutela y colaboración como co-showrunner del propio John Wells, que dirigió los primeros episodios de la serie, pero con Metzler tomando la mayoría de decisiones creativas y de casting.

Netflix no tardó en hacerse con los derechos de emisión y como todas las series actuales su rodaje se vio muy afectado por la pandemia, lo que obligó a hacer una burbuja de varios meses en una zona de la isla de Victoria en la Columbia Británica canadiense, para poder rodar la serie.

En esas condiciones la creadora no dudo en trasladarse a vivir a la isla junto a su marido Colin McKenna, también guionista en la serie y su hija pequeña, para estar absolutamente concentrada en el trabajo que indudablemente va a cambiar su vida.

Sorprendentemente, Netflix no hizo apenas promoción de la serie, pero eso no fue un obstáculo para que la gente la fuera descubriendo y gracias al boca a oreja se convirtiera en uno de sus grandes éxitos otoñales, solo por detrás de los calamares a la coreana. En el video pueden ver su primera promoción.

La trama: ‘La Asistenta’ es una historia de superación personal frente a todas las adversidades inimaginables que le pueden suceder a una joven madre, tanto es así que en muchas ocasiones se plantea la duda de cómo una persona puede aguantar semejante cúmulo de desgracias, mala suerte y malas compañías, todo ello a partes iguales.

El detonante de su situación es el momento en que decide abandonar a su pareja, tras una nueva salida de tono al volver borracho a su casa, sin que haya violencia física pero plenamente emocional y psicológica, lo que hace perfectamente comprensible que quiera alejarse lo máximo posible de ese posible peligro, tanto para ella misma como para su hija, como muestra el tráiler de la serie.

Esa fuga precipitada es el inicio de su vía crucis particular, por el que vamos conociendo poco a poco a su familia desestructurada, empezando por su madre, una artista excéntrica y enamoradiza que nunca ha tenido a su hija entre sus prioridades, lo que provoca frecuentemente una inversión de roles con la hija cuidando de su madre.

Desesperada no duda en recurrir también a su padre con el que no tiene apenas relación, por causas que poco a poco irán siendo reveladas, pero todos sus esfuerzos resultan en vano y no para de ir rebotando de casa en casa.

En paralelo, ‘La Asistenta’ muestra de una forma descarnada los trámites y situaciones, que llegan a ser kafkianas, para poder acceder a las ayudas existentes para las madres en esa situación de desamparo y con una niña pequeña a su cargo.

El siguiente video muestra esa primera reunión con la asistenta social, voluntariosa pero incapaz de dar una solución concreta y rápida al problema de Alex.

El nudo gordiano que se le presenta con la necesidad de tener un trabajo para acceder a las ayudas y a una vivienda. A la vez necesita una vivienda para acceder a una guardería, pero lo resuelve entrando a trabajar en una agencia de asistentas por horas regentada por una jefa bastante miserable que se aprovecha de las situaciones de pobreza de la gente que recurre a ella como es el caso de Alex.

Como necesita agarrarse a un clavo ardiendo, Alex acepta un trabajo ingrato, desagradecido y mal pagado que le lleva a limpiar casas como en su primer trabajo en la lujosa mansión de una ricachona abogada negra de la exclusiva isla de Fisher

‘La Asistenta’ se centra de forma exclusiva en el personaje de Alex Russell y todas las penurias que pasa para poder huir del umbral de la pobreza, en un relato duro y descarnado de las realidades que pasan millones de personas en los márgenes sociales de los EEUU.

En este caso destaca especialmente la resiliencia de Alex Russell y su negativa rotunda a ‘dejarse ir’ como solución más fácil, por el bien de su hija pequeña y sobre todo para  evitar replicar ese comportamiento que tuvo su propia madre con ella.

A pesar de su elevada componente dramática, no dudan en aligerar esa carga al mostrarnos momentos íntimos entre Alex y su pequeñaja Maddie, a la que intenta aislar de todas sus preocupaciones, dedicándole siempre que puede un tiempo de calidad.

Destaca la enorme complicidad entre la actriz Margaret Qualley y su hija en la ficción Ryleah Nevah Whittet, como pueden comprobar en esta escena en el coche, donde ambas cantan a coro, la canción preferida de la niña, en un video subido por el orgulloso padre real de la criatura.

En este punto tengo que destacar la perfección de esa relación gracias a la elección de la pequeñaja Ryleah Nevah Whittet, que con apenas cinco años se muestra adorable y extremadamente natural, haciendo comprensibles todos los sacrificios de su madre para sacar adelante a esa maravilla de niña.

Antes de empezar ‘La Asistenta’ tenía ciertas dudas de que la serie no fuera demasiado dramática en plan ‘porn misery’ y regodearse demasiado en las desgracias de su protagonista.

Por suerte, todas esas dudas se disiparon rápidamente porque si bien es cierto que le pasa de todo a la pobre Alex, esa relación con su hija es un bálsamo perfecto para recargar las pilas y mantener la esperanza de que la protagonista pueda conseguir su sueño de huir para siempre de su marido y con su hija, en un equilibrio perfecto entre las desgracias y el deseo de mejorar.

Los actores:

Margaret Qualley es una de las mejores actrices jóvenes por debajo de la treintena, debutando a lo grande con un gran personaje en ‘The Leftovers’ para ir subiendo poco a poco en el escalafón con apariciones en series como ‘Fosse/ Verdon’ o la película ‘Erase una vez en Hollywood’.

Su consagración ha llegado con este personaje de Alex Russell, lleno de matices donde tiene que pasar de la desesperación y la impotencia a la ternura en cuestión de segundos, en cuanto aparece su hija aparece. Qualley transmite a la perfección, sus ganas de prosperar y de superar todas las penalidades, además de ser la responsable de proponer a su propia madre Andie McDowell para interpretar a su alocada madre Paula, ante la perspectiva de estar varios meses en esa burbuja de rodaje y para ello nadie mejor que su madre para esa convivencia forzada.

Andie McDowell aceptó encantada interpretar a la madre del personaje de su hija, una artista que no está precisamente en sus cabales, ingenua y enamoradiza, que deja que casi todo el mundo se aproveche de ella, menos su propia hija con la que siempre ha tenido una relación bastante tensa y llena de altibajos. Las escenas que ambas comparten son una verdadera delicia al disfrutar de esa enorme complicidad real, para mostrar una relación en las antípodas que la verdadera que tienen.

Andie McDowell fue toda una gran estrella cinematográfica en el tránsito de la década de los ochenta a los noventa con películas en su haber como ‘Sexo, mentiras y cintas de video’ , ‘El Día de la marmota’ o ‘Cuatro bodas y un funeral’.

Tras dar a luz a sus tres hijos bajó el ritmo de trabajo y poco a poco fue haciendo personajes de menor importancia, llegando a protagonizar incluso ‘Cedar Cove’ una lacrimógena serie del Hallmark Channel. Por suerte, este papel puede relanzar su carrera al volver a demostrar la gran actriz que siempre ha sido.

El personaje más antipático y abofeteable de ‘La Asistenta’ es indudablemente Sean, el padre de su hija y detonante de su huida. El mejor elogio que se puede hacer del actor que lo interpreta Nick Anderson, es que consigue encontrarle algún punto de apoyo para no odiarlo completamente, gracias al comodín de la niña, al intentar por lo menos ser un buen padre.

Ser un maltratador sibilino y no explicito, que intenta justificar su comportamiento con todo tipo de excusas es algo complicado pero Nick Anderson sale airoso de esa papeleta, en ese importante personaje secundario

Nick Robinson hasta el momento había tenido una carrera bastante irregular que había empezado como actor adolescente en la comedia ‘Melissa & Joey’ , para alcanzar su punto más alto al protagonizar ‘Love, Victor’ pero luego llegó a su punto más bajo, como el estudiante que se enamora de su profesora en la mediocre y olvidable ‘A Teacher’ , para remontar de nuevo con este personaje.

Epílogo:
‘La Asistenta’ es indudablemente una de las miniseries del año con un excelente final cerrado que no necesita de continuidad aunque no me extrañaría que se inventen alguna cosa para seguir disfrutando del personaje de Alex Russell y su hija Maddie, visto el enorme éxito que ha tenido la serie desde su estreno en Netflix.

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Lorenzo Mejino