Vino de la semana – Chassagne Montrachet Clos St. Jean 07
“Esta es la clase de vino que me gusta.” decía M mientras tomaba la primera copa de este vino. Es que es un vino diferente, un vino que no se parece a otros que tomamos con cierta regularidad. Borgoña tiene un encanto especial, Borgoña tiene alma propia, Borgoña no es para tomar un sorbito y pensar, ni siquiera es para anotar. Borgoña es para que te llene el espíritu, va directo, te llena cada rincón y te eleva el espíritu, no te preguntas a qué sabe ni por qué, simplemente sabes que está ahí, que te reconforta y que, a partir de ese momento, tienes una nueva vida.
Y eso que Chassagne Montrachet es un nombre que se asocia directamente al mundo blanco. Decir Chassagne Montrachet es descubrir un mundo de blancos únicos, quien haya pasado por ese filtro sabe que el mundo de los vinos blancos nunca va a volver a ser lo mismo, ni mejor ni peor, simplemente distinto, porque tus expectativas cambian, tus objetivos son diferentes y tus valores no son los mismos, 5 sobre 10 no es lo mismo en la Tierra que en Marte.
Pero seguimos en Borgoña y la pinot noir es una uva tinta. Clos St. Jean de Domaine Morey en Chassagne Montrachet produce 4 vinos tintos (correspondiente a cada parcela) y 14 blancos (también de cada parcela), este es el primero de sus tintos, un 1er cru que es un modelo elegante para introducirte en el mundo del Borgoña y como quien se introduce en un mundo de nuevas sensaciones merece la pena hacerlo paso a paso, poco a poco, entras en el agua dando pequeños pasos, empiezas a esquiar bajando colinas sencillas y haciendo la cuña, al final eres capaz de disfrutar con retos mayores aunque oara eso tengas que pasarte el día subiendo montes. Puede que incluso este vino, con sus 14% declarados, haya que tomarlo un poco más freso que lo que realmente debería ser, pero eso no importa porque, al final, es Borgoña y por eso ya merece la pena. 40 euros en Enopateka, calle Aldamar en San Sebastián
Blog escrito escuchando: Lambchop – Oh