MANK
Título original: Mank
Año: 2020
Duración: 132 minutos
País: Estados Unidos
Dirección: David Fincher
Guion: Jack Fincher
Música: Trent Reznor y Atticus Ross
Fotografía: Erik Messerschmidt
Reparto: Gary Oldman, Amanda Seyfried, Arliss Howard, Charles Dance, Tom Burke, Lily Collins, Tuppence Middleton, Tom Pelphrey, Ferdinand Kingsley, Jamie McShane, Joseph Cross, Sam Troughton, Toby Leonard Moore, Leven Rambin, Madison West, Adam Shapiro, Monika Gossmann, Paul Fox, Jessie Cohen, Amie Farrell, Alex Leontev, Stewart Skelton, Craig Robert Young, Derek Petropolis, Jaclyn Bethany y Arlo Mertz
Productora: Netflix
Género: Drama / Biográfico
Sinopsis: Biopic sobre Herman Mankiewicz, guionista de ‘Ciudadano Kane’, que repasa el proceso de rodaje de la obra maestra de Orson Welles, dirigida y estrenada en 1941. La película toma como base un guión escrito por Jack Fincher, padre de David Fincher, antes de morir en 2003. (FilmAffinity)
‘Mank’ es un peliculón, partamos de esta base. La última película de David Fincher nos lleva directamente a esa Hollywood de los años 30. Un Hollywood dorado donde la presión política estaba entrando y donde un guionista, Herman Mankiewicz, escribe la que para mucha gente es la mejor película de la historia: ‘Ciudadano Kane’. Una película que, independientemente de que te guste o no, hay que reconocerle la capacidad de reinventar el cine, llevarlo a un punto más adulto y aproximarlo mucho más al cine actual que al de su época.
Con estos mimbres Fincher nos cuenta la historia detrás de este personaje, Herman Mankiewicz, que firmó en la época algunas de las películas más famosas de todos los tiempos, como ‘El mago de Oz’. La cinta nos cuenta con continuos saltos temporales y flashbacks el triste trasfondo que lleva a Mank a escribir ‘Ciudadano Kane’, basándose en la historia del magnate de los medios William Randolph Hearst. Conocemos cuál fue su relación con este personaje, sus contradicciones, sus adicciones y su decisión de llevar su historia a la gran pantalla.
Se nos cuenta poco del rodaje o lo que la propia ‘Ciudadano Kane’ escondía. Aquí vemos el cine entre bambalinas, pero no la película entre bambalinas. Cine dentro de cine, algo que a Hollywood le encanta, y que aquí además se muestra con continuos guiños a la película que catapultó definitivamente a Orson Welles. Las transiciones, la fotografía, los escenarios, la forma de estar rodada, los gimmick (como diría Massiel)… Fincher no nos ha contado cómo se rodó la película como en otros filmes, pero sí que ha impregnado su película del espíritu de aquella. Un homenaje que encantará a los amantes de aquella película y a los del Hollywood de esa época.
El problema que yo tengo con ‘Mank’ es que me resulta carente de emoción. Me ocurre con otras películas de Fincher, y supongo que será problema mío, pero no termino de conectar con los personajes, con su drama, su historia. Está rodada estupendamente, pero no termino de empatizar con Gary Oldman, Amanda Seyfried o Charles Dance. Reconozco la buena labor de interpretación que hacen, pero todos ellos me resultan fríos, distantes y poco empáticos. Se decía de Mankiewicz que era una de las personas más divertidas de Nueva York. Ni rastro de eso. Todo está rodado desde una perspectiva tan sobria como fría. Lamento que el guion de ‘Mank’ no termine de profundizar del todo en los personajes, lo que le habría dado a la película más empaque del que tiene.
La estructura de la película tampoco suma nada, resultando confusa a muchos niveles. Los flashbacks a modo de pinceladas están bien, pero ninguna aporta demasiado a la historia que nos quiere contar. La parte del presente, con un Mankiewicz deteriorado, está mucho mejor lograda, igual que la cinematografía. Estos dos aspectos, el técnico y la mitad del metraje, compensan los problema que presenta la parte del pasado que Fincher no termina de rematar del todo bien.
‘Mank’ probablemente termine siendo la vencedora de la temporada de premios. Una película suficientemente buena como para merecerlo y en un año donde la competencia brilla por su ausencia. La pena con ella es que David Fincher tiene películas mucho mejores por las que merecía más los premios, y que Gary Oldman ya fue premiado hace un par de años por un papel mucho menor que este, por lo que podría irse de vacío. Ahora, la parte técnica de la cinta, la verdadera protagonista, no acepta por mi parte ninguna crítica, y todos los premios que le caigan serán insuficientes.
Lo mejor: El aspecto técnico de la película.
Lo peor: Es fría, distante y carente de emoción.