TRAIN TO BUSAN
Título original: 부산행 / Busanhaeng
Año: 2016
Duración: 118 minutos
País: Corea del Sur
Director: Yeon Sang-ho
Guion: Yeon Sang-ho
Música: Jang Young-gyu
Fotografía: Lee Hyung-deok
Reparto: Gong Yoo, Ma Dong-seok, Ahn So-hee, Kim Soo-an, Jung Yu-mi, Kim Eui-sung,Choi Woo-sik, Jung Kyung-mi, Shim Eun-kyung y Choi Gwi-hwa
Productora: Next Entertainment World
Género: Terror / Acción / Ciencia ficción / Drama
Un virus letal se expande por Corea del Sur, provocando violentos altercados. Los pasajeros de un tren KTX que viaja de Seúl a Busan tendrán que luchar por su supervivencia. (FilmAffinity)
Quien haya leído habitualmente las críticas que voy colgando en este espacio sabrá que no soy muy amante del cine asiático. A excepción del cine japonés, no me han terminado de convencer las cintas que he tenido ocasión de ver procedentes de Corea o China, hasta ahora. Con ‘Train to Busan’ esta idea preconcebida cambia y me encuentro ante una de las más notables películas de terror de la última década, e incluso, de la historia del cine.
En esta película no nos encontramos ante una película de zombies oscura. Todo transcurre de día, con muchísima luz y en un entorno, a priori, nada hostil. Sin dar demasiada explicación sobre por qué sucede todo, ‘Train to Busan’ nos sumerge en una narración frenética donde destacan tanto las escenas de acción como las más profundas.
Con un desarrollo de los personajes importante, estamos ante una película que se puede considerar definitiva para el género. El cine de zombies aprovechó el tirón de ‘The Walking Dead’ para volver a la primera plana, pero ninguna lo ha hecho con el clamor que lo ha hecho este ‘Train to Busan’. Crítica y público se han rendido a los velocísimos zombies provenientes de Corea del Sur. Y todo ello, desprendiendo el aire a película de culto que habitualmente tienen las cintas de Extremo Oriente.
Dura dos horas, pero se pasan volando. Seas o no amante del género, este tren a Busan te sumergirá de tal forma en la historia que sentirás ser uno de sus protagonistas, escapando de una situación terrible. Odiarás a ciertos personajes y amarás a otros. Todo con la cadencia asiática dejada de lado para dotar a la película de un ritmo frenético y contagioso.
Durante la película, el tren, en el que se desarrolla prácticamente toda la trama, se detiene en una estación previa a la ciudad portuaria de Busan. Allí a los pasajeros les prometen encontrarse un lugar seguro. Toda la secuencia de esta estación está rodada con tal maestría y sentimiento que traspasa la pantalla. El cuarto de hora dedicado a esta secuencia es, probablemente, el más brillante del filme, junto a los 10 últimos minutos.
Lo mejor: Reinventa un género donde la innovación había brillado por su ausencia.
Lo peor: Si hubiese sido una película norteamericana estaríamos hablando de uno de los grandes referentes del cine de terror y apocalíptico de la historia.