En diferentes ocasiones hemos indicado el gran progreso que están teniendo las series finlandesas estos dos últimos años con la ventaja añadida de que han podido comprobarlo en nuestro país con ejemplos como ‘Bordertown’ o ‘Deadwind’ a los que vamos a añadir ‘Ártico’ el nombre que tendrá en nuestro país la próxima semana el original ‘Ivalo’ .

Al ser una  coproducción finesa-alemana, ‘Ivalo’ reproduce con bastante traza, el esquema de la pareja protagonista de diferentes nacionalidades que tantos réditos  ha dado en ‘Bron’ y sus imitaciones, así como en la sueco-francesa ‘Midnight Sun’ , pero con el atractivo de su ubicación en los paisajes gélidos invernales de la Laponia más profunda.

Por ello aprovechando su estreno el 18 de Marzo en Cosmopolitan y tras haber visto completa su 1T  vamos a hablarles de una de esas series recomendadas para todos los amantes del ‘nordic noir’ en su vertiente ártica con desolados paisajes helados y congelados.

Ficha: Ártico ( Ivalo) 10 ep + 45 min . Dic 2018- . Idioma: Finlandés/ inglés/ español Cadena: Elisa Viihde (SF) / Cosmopolitan (E)

La trama : La oficial de la policía finlandesa Nina Kautsalo (Iina Kuustonen, cen) es la encargada de la investigación sobre un cadáver de una prostituta rusa encontrado en una cabaña en medio de la nada de la Laponia finlandesa en pleno invierno.

Las cosas se complican cuando en el transcurso de la autopsia, descubren que la chica estaba infectada con un virus mortal que creían erradicado tras haber sido descubierto y controlado en Yemen. Este giro hace que se una al equipo un virólogo alemán Thomas Lorenz ( el actor bavaro Maximilian Brückner, der) , que trabaja en el centro de enfermedades infecciosas de Helsinki para colaborar en la investigación, para intentar descubrir por un lado a las personas infectadas y el modo de contagio, mientras que en paralelo deben averiguar al causante de esa difusión de un virus que se creía controlado.

En el episodio piloto se establece rápidamente ese equipo mixto de trabajo formado por la policía finlandesa y el científico alemán que se comunican entre ellos en ingles. Ambos tienen una complicada vida personal, Nina ( la maravillosa Iina Kuustonen, foto inf)) debido a los problemas que le crea su descarriada hermana Marita ( la excelente Pihle Vihtala, la protagonista de ‘Deadwind’, izq foto sup), así como su hija de seis años aquejada de Síndrome de Down ( interpretada por Venla  una niña con ese síndrome) y que cuida con la ayuda de su madre.

Su colega alemán no está exento de problemas personales, con una grave crisis personal con su esposa finlandesa con la que reside en Helsinki con su hija adolescente. Sus problemas particulares empiezan a mezclarse con la trama del caso, en la que van a escuchar hablar en su versión original de forma indistinta, finés, alemán, ingles y ruso que supongo que serán unificados en el doblaje.

‘Ártico’ tiene una trama que a partir de una aparente sencillez, empieza a complicarse cada vez más con la presencia de toda una serie de personajes que pueden estar implicados en esa propagación del virus, que pone en estado de alerta máxima a las autoridades locales, dispuestas a cerrar todo el norte de Laponia, para contener la situación si empieza a descontrolarse.

De esta manera frente a nuestra pareja de investigadores, tenemos pululando por la zona con motos de nieve a mafias de trata de blancas de la cercana Rusia, corporaciones opacas farmacéuticas o a un nivel más pedestre los delincuentes locales de poca monta que acaban convergiendo en una historia explicada con un ritmo algo más elevado que la habitual cadencia finlandesa como se puede comprobar en su trailer original.

Lo primero que nos va a llamar la atención  son las vastas superficies heladas y desoladas de Laponia, que dan una enorme sensación de soledad y de desamparo ante la dureza de la naturaleza en esa región en especial durante las largas noches invernales.

Sin llegar a la altura de las grandes joyas escandinavas, lo cierto es que  ‘Ártico’ no se queda muy lejos, gracias sobre todo al enorme trabajo de su protagonista Iina Kuustonen que consigue dar una calidez humana a un personaje al que la vida no le ha dado las mejores cartas, pero que no duda en jugarlas con una gran astucia y sabiduría protegiendo a los suyos especialmente a su hermana y a su hija, mientras que su compañero alemán no raya a la misma altura a nivel interpretativo, pero tampoco desmerece el conjunto.

El nombre original de ‘Ivalo’ responde a la población principal de norte de Laponia muy cerca de la frontera rusa y de la noruega, lo que la convierte en una encrucijada de caminos para trapichear con todo tipo de mercancías, incluidas las humanas como vamos viendo en la serie. con un ritmo que va subiendo poco a poco de velocidad hasta llegar al trepidante tramo final, rodado de forma espectacular en la eterna noche invernal  lapona, con las motos de nieve en un lugar preponderante.

Otra decisión acertada ha sido el durísimo  rodaje invernal en Laponia con temperaturas por debajo de los -20ºC ( el rodaje se paraba a -40 ºC)  pero a cambio de obtener unas imágenes de gran belleza con ese blanco brillante que tan poco habituados estamos a ver en nuestras pantallas.

Al ser encargada y estrenada por el servicio de streaming finlandes Elisa Vihhde, la serie tiene una gran continuidad reforzada por unos enormes cliffhangers al final de cada episodio, de los que obligan a los más ansiosos a continuar con el siguiente capítulo, para ver como resuelven esa situación casi siempre de peligro, pero evitando caer en el ridículo de las series de virus polares como la infausta ‘Helix’.

En resumen, si disfrutan con un buen misterio polar, ‘Ártico’ me ha parecido una excelente propuesta que personalmente me ha gustado mucho en especial por su gran actriz protagonista, digna sucesora de esas grandes protagonistas nórdicas que seguro que les vienen ahora mismo a la cabeza, por lo que nada mejor que dejarles con la promoción de Cosmopolitan, como preludio de su estreno español el próximo lunes por la noche.

Esperamos sus opiniones y comentarios, aquí o en nuestra cuenta de twitter (@lmejino). Hasta la próxima

Lorenzo Mejino